Tilín Tilón: una obra que gusta, pero no encanta

Hoy, es la primera función para el público del musical infantil Tilín Tilón, en la sala Máximo Avilés Blonda del Teatro de Bellas Artes, el cual marca el regreso de Ysabel Aracena, mejor conocida como Isha.

Hoy, es la primera función para el público del musical infantil Tilín Tilón, en la sala Máximo Avilés Blonda del Teatro de Bellas Artes, el cual marca el regreso de Ysabel Aracena, mejor conocida como Isha.Este musical, producido y dirigido por Joyce Roy, cuenta con un talentosísimo elenco de niños y jóvenes, que recientemente dieron una función para los medios de comunicación. ¿Qué esperar de Tilín Tilón? Es un musical con un mensaje educador, con el que se busca inculcar a los más pequeños el respeto a los mayores, en especial a los padres, y a valorar la amistad, sin distinción de clases.

En esta obra, escrita por Bianca García (quien participa con el bien logrado personaje de Payaso Encerrado),  Isha, la polifacética artista que antes se despatillaba, brincaba y cantaba con gran entusiasmo y energía, está oxidada.
Su personaje, la Hada de los Juguetes, Rose, merece más entrega por parte de Isha, quien durante la promoción de la obra decía que hacía su retorno a los escenario de manera “tímida, sin mucho ruido, para romper el hielo luego de muchos años lejos de los medios”. Esa timidez no cuaja.

En cuanto a la participación de Daniela Machuca (Agatha), Carlos Brian (periodiquero), Yaromi Jáquez (florista), Diego Lassis, Eduardo Díaz y César Mena (limpiabotas) se puede decir que son muy talentosos y que se disfrutan en todo momento de su participación.

Claudia González, la señora Burbuja, tiene una voz que “engrifa”  y su personaje es adorable. Mientras que los actores que mejor dominaron sus personajes fueron Mavel Paulino (Lola), María de Lourdes (Nana María) y Jared Gómez (Rambo de la Selva).  Mario Peguero (Juguetero y el Ken) fue una agradable sorpresa, y de Hony Estrella (Barbie) se esperaba más. En cuanto a la coreografía, es simple, en algunos de los participantes hace falta un poco más de ensayo y concentración. Los elementos que conformaron la escenografía cumplieron su función, la de ambientar una juguetería. Esto, sin estorbar a los actores y bailarines. La idea del vestuario estuvo bien concebida. Sin embargo, se debió tomar en cuenta algunos detalles, como el asegurar las pelucas, luces de los robots y otros elementos para que no estorben. El maquillaje en algunos de los personajes destacaba más que en otros. Este musical infantil continúa en escena los días 2, 7,8 y 9 de marzo.

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