Hoy es un día grande. Porque el 17 de enero de 1942 nació Muhammad Alí, ¡el más grande! Alí, el primer boxeador en ganar tres veces la corona mundial de los pesos completos, cumple hoy 70 años de edad. ¡Cómo pasa el tiempo!El 25 de febrero de 1964, el entonces carismático y filósofo boxeador estadounidense conquistó -a los 22 años de edad- el cetro mundial de los pesos completos al derrotar por nocaut técnico en el séptimo asalto a Sony Liston quien a la sazón estaba considerado como “inderrotable”.
Y para ratificar que lo que había ocurrido, en la pelea de revancha con Liston, Alí salió airoso de manera más contundente. Liston fue noqueado en el primer asalto. Aquello fue de locura.
Cassius Marcellus Clay Jr, el nombre original del extraordinario boxeador nacido en el pequeño pueblo de Louisville, Estados Unidos, sentó un singular precedente en el exigente mundo del boxeo de paga. Su historia en el deporte de los puños enguantados se remonta desde que dio inicio en los tinglados olímpicos.
Alí le puso un sello indeleble a su grandeza cuando se adueñó de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de 1960, celebrados en Roma. La ganancia de su presea dorada fue en la división de los semipesados (175 libras).
Grandeza y desgracia
¿Quién no acepta que Muhammad Alí ha sido el más grande de los boxeadores de la llamada división “madre”?
Bueno, algunos expertos, principalmente de la prensa especializada en Estados Unidos, no aceptan tal consideración. Entienden que Joe Louis, único púgil que como peso completo defendió 25 veces su corona mundial, es quien debe ser calificado como “el mejor peso completo de todos los tiempos”.
Sin embargo, la mayoría de los historiadores y analistas está conteste de que Alí, quien siempre tuvo como entrenador al sensacional técnico Ángelo Dundee, debe ocupar la primera casilla entre los más capacitados púgiles de la categoría completa. Hizo famosa esta frase: “Pico como una avispa y vuelo como una mariposa” al tiempo de que fue el primer boxeador que vaticinaba en qué asalto iba a ganar sus peleas.
Sus contundentes victorias sobre Joe Frazier, a quien derrotó dos veces en los tres combates que protagonizaron, se pone como efectivo termómetro para evaluarlo como el más grande peso completo de todos los tiempos. El match del 1 de octubre de 1975 -montado en Manila, la capital de Filipinas- entre Alí y Frazier ha sido calificado como “la mejor pelea en la historia del boxeo mundial”.
En 14 violentos asaltos, en los que hubo golpes de todos los “calibres” y sin parar ni un segundo, Alí se alzó con la victoria por abandono. Frazier, recientemente fallecido, no se levantó de su banqueta para seguir peleando en el 15avo round.
Es famosa la frase que, tras ser declarado ganador, Alí les dijo a los periodistas Alí: “Nunca había estado tan cerca de la muerte”. Un año antes, el 30 de octubre de 1974, en África, el parlanchín peleador estadounidense devastó a su paisano George Foreman. Fue la victoria que catapultó a Muhammad Alí a la inmortalidad del boxeo de todo el orbe en razón de que a los 32 años de edad -ya viejo para la época- y contra un enemigo fuerte, verdugo, invicto en 40 peleas, con sólo 26 años y el favorito (6-1) de los expertos.
La grandeza de Alí, en sus dos combates-victorias seguidos ante Frazier y Foreman, opacó la desgracia que por casi cuatro años lo afectó. Es referente a que perdió el cetro mundial pesado sin tirar un golpe. Además de cancelarle la licencia de boxeador, lo dejaron sin corona por no cumplir con su alistamiento al Ejército de Estados Unidos y negarse a estar en la guerra de Vietnam.
Positivo
Pese a su enfermedad (el mal de Parkinson), no ha cambiado su pensamiento que dio a conocer cuando era un bisoño peleador.
Dinero
Cuando Alí enfrentó a Foreman en 1974 y que se había propuesto recuperar su faja mundial, ganó cinco millones de dólares.
