Juventud Mariana Vicentina (JMV)

IntroducciónContinuamos hoy nuestras entregas periódicas sobre el “Protagonismo de los laicos en la Iglesia”, a través de sus Movimientos, Asociaciones y Nuevas Comunidades.  Esta es la número 14.  Hablaremos, pues, ahora de la Juventud…

Introducción
Continuamos hoy nuestras entregas periódicas sobre el “Protagonismo de los laicos en la Iglesia”, a través de sus Movimientos, Asociaciones y Nuevas Comunidades.  Esta es la número 14.  Hablaremos, pues, ahora de la Juventud Mariana Vicentina (JMV)

1. Historia
Para el año 1830 Francia se encontraba inmersa en revoluciones por intereses políticos de la monarquía y la corona, revoluciones que llevaron a Luis Felipe I al trono; esto dio lugar al periodo conocido como “La Monarquía de Julio”. Es en medio de estos acontecimientos e incertidumbres sociales, donde en París, exactamente en la Calle del Bac (Ruje du BAC), en la casa Madre de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, la Virgen María deja un mensaje a la humanidad.  Justamente ese marco servirá de referencia histórica para los orígenes de la presentación que nos ocupa.

2. Catalina Labouré, Medianera del mensaje de la Santísima Virgen
Una humilde joven campesina de Borgoña, de la comuna francesa Fain Le Moutiers, llamada Catalina Labouré, responderá al llamado de Dios a través de la Compañía de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, fundada por el Santo, junto a Santa Luisa de Marillac, el 29 de noviembre de 1633, con el fin de servir a los pobres. Catalina  ingresa como postulante en 1829 y luego, en el Seminario ubicado en la Casa Madre, en enero de 1830. Es en esta última donde suceden los acontecimientos más importantes de su vida: es visitada varias veces, nada más y nada menos, que por la Santísima Virgen María. Desde muy pequeña Catalina muestra un gran afecto y amor por la madre de Dios; tras la pérdida de su madre, a muy temprana edad, la niña desborda todo su amor y busca consuelo materno en María. Cuenta la historia que fue vista dirigiéndose a una imagen de la Virgen en su casa y acercándose a ella le dijo: “Ahora tú serás mi mamá”.

3. Historia de las apariciones
La noche del 18 de julio de 1830 fue el origen de una Asociación Mariana. Catalina Labouré va a descansar con mucho deseo de ver a la Santísima Virgen. En horas de la noche, entre el 18 y 19 de julio, un ángel en forma de niño la despierta de su sueño y la invita a dirigirse a la capilla de la casa. Al llegar a la capilla, conducida por el ángel, se encuentra con la sorpresa de ver a la Santísima Virgen sentada en la silla reservada para el sacerdote. Catalina corre al encuentro; arrodillada, con sus manos en las rodillas de la Santísima Virgen, cuenta Catalina que ahí ocurrió el momento más dulce de su vida; tanto, que le era imposible explicarlo. La Virgen entonces le revela   muchas cosas sobre su vida, el futuro de Francia y, sobre todo, le encomienda una misión.  Aquí las palabras textuales de los escritos de Catalina a su confesor el P. Aladel: “La Santísima Virgen quiere de Vd. una Misión: quiere que dé comienzo a una Orden, de la cual usted será su fundador y director. Se trata de una cofradía de Hijos e Hijas de María”. Esta Orden es la que se conoce hoy en día como Asociación Internacional Juventud Mariana Vicentina.

4. La segunda aparición ocurrió el 27 de noviembre de 1830
En ésta, la Virgen pide a Catalina que mande a acuñar una medalla exactamente con la visión que tuvo en ese momento de la Santísima Virgen (en el anverso) vestida del sol, coronada con 12 estrellas con los brazos extendidos, el mundo bajo sus pies y aplastando la cabeza de la serpiente. En el reverso: los corazones de Jesús y María junto al Anagrama, envueltos por doce estrellas (La Iglesia). De esta manera, deja su mensaje para el mundo, grabado en una sencilla medalla, conocida tiempo después, como “La Medalla Milagrosa”, prometiendo infinitas gracias a quienes la lleven con confianza. Hoy, miles de cristianos en el mundo portan con gran devoción la medalla y muchas asociaciones y grupos la promueven por todos lados. La Medalla Milagrosa es el distintivo de la Juventud Mariana Vicentina, un recordatorio del Evangelio y de la misión que le fue confiada la noche del 18 de julio de 1830.

5. En República Dominicana
Desde el 1981, el espíritu Mariano Vicentino se hacía presente en el Centro Educativo Marillac (Casa Provincial de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl) y en la Parroquia San Vicente de Paúl; todo esto gracias a la presencia de las Hijas de la Caridad y los padres de la Congregación de la Misión de San Vicente de Paúl que laboraban allí. Pero no es hasta el 1992, tras la celebración del V Centenario de la Evangelización en América, que se aprovecha la oportunidad para convocar en Santo Domingo el 1er Congreso Iberoamericano de JMV. Este acontecimiento marca la formalización de la asociación en el país. En el 1993 se celebra el 1er Encuentro Nacional de JMV donde se realiza la primera elección del Consejo Nacional y se fija el asiento del Secretariado Nacional en la Parroquia Santa Luisa de Marillac de Los Tres Brazos. Desde entonces, la Asociación ha crecido en cantidad, espiritualidad, formación y servicio. Hoy se encuentra expandida en todas las parroquias de los Padres Paúles y algunas casas de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl. Es reconocida por el Arzobispado de Santo Domingo en febrero del 1992 y, a nivel internacional, son aprobados sus primeros estatutos nacionales en abril del 2001.

6. Identidad
JMV es una Asociación Católica Internacional, formada principalmente por jóvenes laicos, cuyo marco de referencia son las Asociaciones Laicas Internacionales de Fieles. Es la misma Asociación de Hijos e Hijas de María Inmaculada, que tuvo su origen en las apariciones de la Virgen María a Santa Catalina Labouré en 1830. La Asociación de Hijos e Hijas de María fue aprobada por el Papa Pio IX mediante los rescriptos del 20 de junio de 1847 y el 19 de julio de 1850. La Santa Sede, por decreto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica del 2 de febrero de 1999, aprobó los Estatutos Internacionales y reconoció el nuevo nombre de la Asociación, que mantiene la misma identidad. (Estatutos Internacionales Art. 1).

7. Espiritualidad
La Asociación, por su naturaleza, es Laical, Eclesial, Mariana, Vicentina y Misionera. (Estatutos Internacionales Art.5). Por tal razón, el seguimiento de Jesucristo, evangelizador de los pobres, y la mirada atenta al ejemplo de María y de San Vicente de Paúl, hacen que JMV viva una espiritualidad cristocéntrica, mariana y vicentina.  En resumen, la Espiritualidad de la Asociación está fundamentada en el cántico del Magníficat, invitando a los jóvenes a vivir las virtudes características de: Humildad, Obediencia, Caridad y Pureza.

8. Lema y logo
El lema de la Asociación “A Jesús con María”, encierra su razón de ser: seguir a Jesucristo acompañados de su Madre la Virgen María, fundadora de la Asociación. El logo de la Asociación es en parte el reverso de la Medalla Milagrosa: el anagrama de María, acompañado por las letra J y V (jóvenes de la familia de San Vicente de Paúl); todo esto encerrado por doce estrellas (la Iglesia).

9. Fines y medios
La finalidad de la Asociación es la formación integral de los jóvenes, llevándolos al encuentro personal con Cristo desde la vida de oración contemplativa, en humildad y sencillez como María, y el servicio de los pobres al igual que San Vicente de Paúl. Para lograrlo se propone la vida en comunidad cristiana, con un proceso de formación sistemática, el estudio de la Palabra de Dios, el servicio a los necesitados y la inserción en la vida parroquial.

10. Servicio a la iglesia y la sociedad
El rol de JMV en la Iglesia Católica es fundamental; sus miembros se integran en la vida parroquial activamente desde: el servicio con la catequesis (en especial con los niños y adolescentes), las celebraciones litúrgicas, las distintas pastorales (juvenil, mariana, social, entre otras) y haciendo vida su nota misionera: el llevar el Evangelio a los más necesitados, en sus parroquias y en distintos lugares del país. En la Sociedad, atendiendo al carisma Vicentino, se da en la asistencia a los enfermos, los ancianos, los niños desposeídos y la colaboración activa en las obras sociales de las Hijas de la Caridad y los Padres Paúles.

11. Acto de consagración
La Asociación ofrece a los jóvenes la Consagración a Cristo por María como una manera de explicitar su consagración bautismal y hacer de su vida un don total a Cristo, desde el servicio y la evangelización de los pobres, eligiendo a María como Madre y modelo de vida. (Est. Internacionales Art. 10)

12. Estructura y organización
JMV está estructurada de forma jerárquica por Consejos Directivos, tanto a Nivel Internacional como Nacional. La Dirección General de la Asociación corresponde al Superior General de la Congregación de la Misión e Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl. (Est. Internacionales Art. 3).
En República Dominicana, JMV se rige bajo los lineamientos de sus Estatutos Nacionales. La Asociación se organiza y estructura de la siguiente manera: Asamblea Nacional, Consejo Nacional, Consejos de Centro y Consejos de Comunidad. Tiene su domicilio Social (Secretariado Nacional) en el Centro Educativo San Vicente de Paúl del sector Los Mina, Santo Domingo Este.
CONCLUSIÓN

CERTIFICO que los datos expuestos por mí sobre la JUVENTUD MARIANA VICENTINA (JMV) me fueron ofrecidos por el Consejo Nacional, directivo de este Movimiento.

DOY FE, en Santiago de los Caballeros, a los veintiún días del mes de julio del Año del Señor dos mil quince (2015).l

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