El precandidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana Francisco Javier García dijo que está de acuerdo con que el Comité Político de esa organización discuta el tema de la reelección presidencial si el presidente Danilo Medina lo plantea.
No obstante, Javier García rechazó que el alto organismo peledeísta se aboque a discutir ese punto porque lo esté proponiendo Ramón Ventura Camejo.
El también ministro de Turismo aclaró que Ventura Camejo no es mensajero del presidente Medina Sánchez y por tanto no puede estar haciendo planteamiento por el primer mandatario.
Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´AGENDA que cada domingo se difunde por Telesistema, canal 11, Francisco Javier dijo que el beneficiario de la reelección sería el actual mandatario y por lo tanto él es que tiene que pedirlo.
Dijo que Camejo está actuando como un trapecista y le recordó a su compañero de partido que todo el que no sabe trapecismo y se pone a practicarlo se puede golpear la cabeza.
“Yo solo estaría de acuerdo que se toque el tema de la reelección si el beneficiario de la reelección pide que se discuta, si el compañero Danilo, en este caso presidente de la República, quiere que se discuta el tema yo estoy de acuerdo que se discuta, pero yo creo que Danilo no tiene mensajero, a menos que Camejo diga que él es el mensajero del Presidente, cosa que yo dudo”, apuntó.
Francisco Javier aclaró que el primer mandatario en ese y otros temas es un hombre que actúa con mucha responsabilidad.
El alto recordó que cuando el presidente Leonel Fernández optó por buscar la reelección presidencial en el 2008 no llevó ese tema para que el Comité Político lo discutiera.
Empero, García Fernández favoreció que ese órgano se reúna para discutir otros temas, entre ellos el sometimiento a la justicia que ha hecho el procurador general de la República al secretario de organización del partido, el senador por San Juan Félix Bautista.
Explicó que hay temas de la agenda nacional que el Comité Político debe analizar, e inclusive hay veces que el primer mandatario pide opiniones sobre algunos temas inherentes a su gobierno, aunque dicho organismo nunca interviene en la agenda del presidente.
