Analistas políticos consideran que Danilo Medina tendría que emplearse a fondo para lograr la unificación del PLD y la incidencia del liderazgo de Leonel Fernández para poder retener la Presidencia.
El cambio en el escenario electoral tras la alianza entre el Partido Revolucionario Moderno (PRM) y el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) tiene como primer efecto que cambia la percepción de que la candidatura presidencial del presidente Danilo Medina es electoralmente invencible por sus altos niveles de popularidad y su gran cantidad de aliados.
Tras la alianza, el candidato presidencial del PRM, Luis Abinader, se coloca en condiciones competitivas y a Medina lo obliga a unificar al PLD pues su permanencia en las preferencias del electorado estaría condicionada al papel que desempeñe en la campaña el expresidente Leonel Fernández.
“Si bien es cierto que el presidente Danilo Medina tiene las preferencias del electorado tiene que trabajar en la unificación de su partido que no está plenamente unificado”, dijo el politólogo y catedrático de ciencias políticas Freddy Ángel Castro.
Explicó que otras variables que atentan contra la permanencia de la popularidad de Medina es que a pesar de que la oposición no está unificada en términos de alianza, su discurso en contra del gobierno sí está consolidado.
“Hay un cambio de percepción en la gente con esta alianza del Partido Reformista y el PRM y otras alianzas posibles de forma tal que ahora la gente piensa que el presidente Danilo Medina puede ser alcanzado”, explicó.
Igualmente señaló que la alianza representa “un gran impulso para la candidatura de Abinader” que ha sido hasta inesperado. “Si uno analiza tres meses atrás esto no se veía venir y es un impulso no solo cuantitativo sino cualitativo”.
El PRSC tiene el recuadro tres de la boleta electoral y en el 2012 obtuvo más del 6% de los votos válidos emitidos.
Otro punto contra el proyecto de Medina es la salida de la Fuerza Nacional Progresista por el papel que jugó en los gobiernos del PLD. “Los gobiernos necesitan personas que jueguen roles en distintos escenarios, y quien hacía la función de contención ante los ataques de la oposición era la Fuerza Nacional Progresista, y ahora tú no encuentras en el Gobierno quien responda el día a día con esa destreza y agudeza”, observó el politólogo Castro.
División en PRSC, un punto a favor Medina
La división que podría producirse en el reformismo por el rechazo de algunos dirigentes a la alianza con el PRM podría provocar que un sector respalde a Medina. Castro observa que aunque esa será la actitud de los reformistas que están en el gobierno es posible que la baja no sea significativa “porque son dirigentes de gabinete” que no tienen estructura. Modesto Guzmán, Alexandra Izquierdo, Marino Collante y Luis Bogaert, rechazan la alianza.
