Santiago. Del conjunto de obras prometidas por el pasado gobierno en comunidades de la Cordillera Septentrional, ubicadas entre las provincias Santiago y Puerto Plata, algunas durante visitas sorpresa, en su mayoría quedaron sin concluir.
Desde un centro de salud que lleva 19 años en espera en la comunidad de Gurabito de Yaroa, el cuartel y una panadería ubicada en La Cumbre y que estaban a cargo del Fondo Patrimonial para las Empresas Reformadas (Fonper), también se encuentra en la larga lista de las que requieren terminación. En el caso de la carretera turística Gregorio Luperón, ésta fue dejada avanzada en más de un 90 por ciento de su reconstrucción. La vía fue sometida a un proceso de reparación por el Ministerio de Obras Públicas y solo falta por completar el tramo que comunica al poblado de Yásica. Debido a la cantidad de polvo que se levanta con el paso de vehículos, los propietarios de viviendas y establecimientos comerciales han coloca los llamados “policías acostados”.
Trayecto esperado
En total son 60 los kilómetros de trayecto desde la provincia de Santiago hasta Puerto Plata. En la vía de dos carriles, además de ampliarla, la empresa contratista ha colocado sistema de alcantarillado, desagüe y ha levantado muros de contención en puntos críticos, donde a lo largo de los años han colapsado decenas de viviendas.
Con la reconstrucción y ampliación de la vía serán beneficiadas unas 30 comunidades en la Cordillera Septentrional, como son La Cumbre, El Llano, Pedro García, Lajas, Yaroa, Sonador, Tubagua, Yásica, El 30, La U, El 20, El Capaz, Los Mellizos, Camú, Palo Quemado, La Cumbre de Juan Veras, entre otras. La terminación de la carretera turística, junto a la Navarrete-Puerto Plata, fue de las principales demandas hechas por los sectores productivos de las provincias de Puerto Plata y Santiago.
Construcciones iniciadas, paralizadas
Aunque el pasado gobierno prácticamente terminó la construcción de la policlínica de la comunidad Gurabito de Yaroa, en el distrito municipal de Yásica, aún faltan detalles para poder ofrecer sus servicios. En tanto que el FONPER, había retomado la construcción del cuartel policial y la panadería en la comunidad La Cumbre, pero ambas obras fueron paralizadas.
