“La lucha sigue (…) queremos volver al kilómetro 12”, el clamor de decenas de vendedores del mercado La Pulga quienes protestaron ayer en las afueras del Palacio Nacional.
Los pulgueros reiteraron su posición de regresar a su antiguo punto comercial en el kilómetro 12, de la avenida Independencia, al alegar que las autoridades del Ayuntamiento de Santo Domingo Oeste, “juegan al cansancio” y que a la fecha no cuentan con un espacio para colocarse.

“Ya no tenemos otro espacio que no sea el 12. Solo quedan pocas semanas para que finalice el año y queremos que el presidente Luis Abinader nos permita trabajar”, dijo Luis Lora, secretario general de la Asociación de Vendedores de La Pulga.

Comentaron que pese a la disposición del alcalde de esa demarcación, José Andújar, de trasladarlos de forma provisional a unos terrenos ubicados entre las avenidas Gregorio Luperón e Isabel Aguiar, en la calle Juan Ballenilla de la Zona Industrial de Herrera, los empresarios del lugar se opusieron a la idea.

En tal sentido, solicitaron regresar de forma organizada al kilómetro 12 hasta que finalice el año o en su defecto colocarse debajo del elevado de la Luperón con George Washington, espacio que entienden le pertenece a la Alcaldía del Distrito Nacional.

El grupo de hombres y mujeres pidió presidente de la República, Luis Abinader, escuchar su clamor de volver a sus ventas lo más pronto posible, ya que cientos de familias dependen de los empleos que genera el sector.

Piden a Abinader aportar redursos

El excandidato a la Alcaldía de Santo Domingo Oeste, Francisco Luciano, hizo un llamado al presidente Luís Abinader para que aporte los recursos necesarios, a fin de adquirir los terrenos y poder reubicar el Mercado de Las Pulgas, donde miles de dominicanos se ganan el sustento de sus familiares, y a su vez exhortó a las alcaldías del Distrito y Oeste servir de mediadores entre vendedores y el Poder Ejecutivo para buscar una solución adecuada al mercado.

Posted in Destacado, País

Más de destacado

Más leídas de destacado

Las Más leídas