Será el próximo martes cuando el Ministerio Público comience a presentar, en el juicio de fondo del caso Odebrecht, las 1,700 pruebas que ofertó en contra de los seis imputados.
Esta nueva fase tenía previsto iniciar ayer, pero la audiencia tuvo que ser aplazada, ya que el coordinador de la barra de defensa del imputado Víctor Díaz Rúa, el jurista Miguel Valerio, se encuentra ingresado en un centro de salud afectado de COVID-19.
Para garantizar el derecho de defensa de Díaz Rúa, las tres juezas del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional decidieron suspender la audiencia.
El Ministerio Público se opuso a la suspensión, pero el tribunal explicó que los certificados médicos que avalan la condición de Valerio fueron depositados como prueba.
Wilson Camacho, titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), indicó que estaban preparados para presentar sus testigos, entre ellos de nacionalidad brasileña.
Estos testigos son parte de las pueblas que tiene el Ministerio Público para demostrar la supuesta participación, en los sobornos dados por Odebrecht, de los imputados Ángel Rondón, Tommy Galán, Víctor Díaz Rúa, Andrés Bautista, Conrado Pittaluga y Juan Roberto Rodríguez
El Ministerio Público le atribuye a Rondón Rijo haber recibido más de 1,000 millones de pesos en sus acciones delictivas con Odebrecht.
