El Ministerio Público aseguró que sigue firme con su acusación contra los implicados en el crimen del profesor y abogado Yuniol Ramírez Ferreras y en el escándalo de corrupción en la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA).

La defensa de los familiares de la víctima estableció que entre las razones para retirarse del proceso es que la acusación presentada por el Ministerio Público “es una acusación corrupta, encubridora y hecha con la única intención de lograr la impunidad de Manuel Rivas, de Faustino Rosario y Eddy Santana Zorrilla”.

Sostuvo que por tal “razón interpusimos una querella penal ante el actual Consejo Superior del Ministerio Público sin que hasta el día hoy se haya hecho nada al respecto”.

Ante estas declaraciones, la fiscal Mirna Ortiz, de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), dijo que no se ha formalizado ninguna actuación al respecto, más que su notoria ausencia en el día de ayer en la audiencia del juicio de fondo contra los imputados en este caso en el Segundo Tribunal Colegiado del Distrito Nacional.

En ese sentido, manifestó que el Ministerio Público solicitó al tribunal que sean citadas las víctimas, “ya que en su condición de víctimas debe de salvaguárdeseles el derecho que tienen a estar presentes en el proceso, y de no asistir para la próxima audiencia, entonces el tribunal estaría asumiendo el desistimiento de esta parte del proceso”.

Ortiz destacó que por ello la acusación no sufre ningún revés, puesto que esto es un caso de acción pública, al tiempo de resaltar que el Ministerio Público continúa firme con su acusación.
El profesor universitario Yuniol Ramírez, de 45 años, fue asesinado y encontrado con sus manos atadas con cadenas y sujetas a un block en una cañada en Santo Domingo Oeste, el 12 de octubre del 2017. Supuestamente, a este lo mataron porque habría tenido la intención de revelar un entramado corrupto que funcionaba en la OMSA.

El órgano persecutor acusa por el crimen a Argenis Contreras, señalado como el principal autor material del secuestro y asesinato del abogado y profesor, así como a José Mercado, alias El Grande, Víctor Ravelo Campos, conocido como El Herrero, Jorge Abreu, Heidy Peña y Lilian Francisca Suárez Jáquez.
Mientras que a Manuel Rivas, director de la OMSA en ese entonces, el Ministerio Público lo acusa de soborno, crímenes de corrupción, asociación de malhechores para cometer prevaricación, desfalco, así como de estafa en perjuicio del Estado dominicano, entre otros delitos.

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