En el restaurante D’Javier Mariscos, el emprendedor ofrece desde camarones al ajillo, hasta tilapia roja estilo Boca Chica

Apesar de que la pandemia de coronavirus dejó sin empleo a muchas personas, también ha servido de motivación para que otros saquen la vena de emprendimiento que llevan dentro e inicien su propio negocio, teniendo así otra entrada monetaria para sustentar a su familia en medio de esta crisis.

Por lo general, los negocios de comida suelen ser muy rentables, es una inversión a largo plazo que con esfuerzo y mucha dedicación puede dar los frutos al ciento por uno, y es por esto que muchas personas deciden incursionar en el área gastronómica, ofreciendo variedades de platillos únicos a un público que ansía deleitar el paladar con alimentos nuevos.

Este es el caso de Corpus Montero, un hombre oriundo de Las Matas de Farfán, provincia San Juan, que actualmente labora como reportero gráfico en CDN canal 37, cubriendo el área de salud. Es debido a la pasión que siente por el tema alimenticio que decidió dar apertura a su restaurante D’Javier Mariscos, donde ofrece al público comidas nutritivas, sin procesar y directamente del mar.

Corpus narra que tuvo una infancia feliz como la mayoría de los niños criados en el campo, llena del cariño y el apoyo de sus padres, vivencias que lograron convertirlo en el hombre gozoso, sincero y trabajador que es hoy día.

“Por la experiencia que tengo en el área, desde hace tiempo venía pensando en un negocio de comida, y aunque este inició en medio de la pandemia, el virus no ha sido una razón para que mi motivación baje, sino todo lo contrario”, le dice el emprendedor al periódico elCaribe.

Los condimentos artificiales no forman parte de la preparación de los platos y es por esto que tienen como ingrediente básico el aceite de oliva, para preservar la salud de las personas que ponen su confianza en el servicio que brinda la pequeña empresa de Corpus.

“Es bien conocido que aumentar el consumo de pescados y mariscos es la mejor manera de ayudar al organismo, ya que contienen proteínas, vitaminas A y D, fósforo, magnesio, selenio, yodo y ácidos grasos como el Omega 3 que sirve para disminuir los problemas cardiovasculares”, explica el joven emprendedor.

Dentro de los servicios que ofrece están: camarones al ajillo, salpicón de mariscos con tostones, pescado frito, sopa de pescado, masa de cangrejo, moro de guandules con coco, pescado a la plancha, anillos de calamar, lambí a la vinagreta, pescado en escabeche, un especial de tilapia roja al estilo Boca Chica, entre otros. A Corpus Montero se le puede contactar por medio de las redes sociales @d.javier.marisco, acudir al establecimiento que está ubicado en la Calle Primera, número 15, Ensanche Kennedy detrás del DICAM o llamar al teléfono 829-974-2913.

Corpus es un hombre de visión clara. “Es imposible que una persona en República Dominicana viva solo de un empleo; es necesario poner a fluir los talentos para sacarle beneficios”, asegura.

Ha sacado espacio de su agenda para conversar sobre un tema que le apasiona. Desde muy joven le ha gustado moverse en los negocios, por lo que su primer trabajo lo tuvo siendo muy joven.

El propietario de D’Javier Mariscos indica que su objetivo principal es darle una mejor vida a su familia y tener un negocio que “más que mío sea también familiar”.
Con apenas cinco meses, el apoyo de sus amigos y parientes, en especial el de su esposa que también le colabora, ha sido primordial para su crecimiento. Consideró que brindar un servicio con amor y humildad, teniendo en cuenta las necesidades de cada cliente, es otra clave para seguir adelante.

Al principio, debido al toque de queda, el horario era hasta las cinco de la tarde pero como las autoridades han variado un poco las medidas de restricción, el establecimiento cierra a las 11:00 de la noche, ofreciendo así por medio de delivery un servicio continuo para llevar a sus clientes sus aperitivos favoritos.

Con relación a sus ingresos, explica que para un negocio que todavía es relativamente nuevo es muy rápido hablar de ingresos, ya que todo principiante debe esperar para ver los frutos y es un proceso por el que todos los comerciantes deben pasar. Exhorta a todos aquellos que tienen una idea empresarial, a lanzarse y dejar el miedo atrás “si te caes levántate y vuelve a empezar”.

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