Hay un momento en la vida de muchas personas en que, sin previo aviso, llega un torbellino. Una revuelta total de la vida que pone todo patas arriba, te destroza el alma y tienes que aprender a reconstruirte.
El cantautor español pasa por ese momento.
Hace pocos días daba a conocer que estaba deprimido, derrumbado, con ganas de mandarlo todo a la m… Sus razones tiene.
«No sé si esto sirve de algo pero quiero decirlo. Estoy triste y cansado», expresó entonces.
Se ha especulado como causante del torbellino supuestas deudas económicas, bancarrota. Que otra vez está a punto de perderlo todo, debido a la estafa de un íntimo amigo.
Se desconocen las razones, porque Sanz no las ha mencionado. Pero ahora se sabe que rompió con la que ha sido su pareja durante cuatro años.
La pintora cubana Rachel Valdés siempre pareció demasiado frufrú para Sanz.
«Es un agujero que se te hace aquí de repente y no sabes muy bien por qué. Y desde este agujero aquí en el pecho os quiero dar las gracias, por estar ahí y por entenderme», manifestó este sábado.
«A estas cosas nunca intentemos buscarles un porqué, no es por nada ni por nadie», dijo en el concierto, el primero en medio de la crisis.
«Yo intenté sincerarme y lo escribí porque lo sentía así y fue muy bello. Después salieron otras cosas… Ruido, el ruido no es para nosotros, lo nuestro es otra cosa, muchas gracias a todos». En medio del torbellino expresó el cantautor del Corazón partío, según la revista Hola.
Este tipo de depresión es peligrosa, pero es superable. Yo mismo la pasé. Fue en 1998. Murió mi padre a los 62 años de un ataque al corazón mientras dormía. Murió mi madre con 60 años, a los cinco meses, de cáncer.
Me había separado de mi pareja anterior. No pude seguir en el trabajo que quería.
Dios pone las cosas en su sitio para superar los desastres causados por el torbellino. A mí me puso en el camino la nueva relación, que fue, precisamente con una psiquiatra. La mamá de mi hijo menor.
De no ser por ella probablemente yo no lo hubiese superado.
Aquel torbellino me trajo un cambio en mis rutinas, mi forma de vivir y mi forma de pensar. Por eso estoy aquí 25 años después.
Lejos de mi patria. En otra patria nueva que venero y adoro.
