El angustiante triunfo en San Petersburgo y la derrota de Islandia por 2-1 ante Croacia cuadraron bastó para que Argentina y Messi se citen con Francia en la siguiente fase. El propio Messi anotó el primer gol albiceleste con un fulminante derechazo apenas a los 14 minutos.
Pero un penal cometido por Javier Mascherano y convertido por Victor Moses empató el marcador a los 48. A ello, siguieron otros pasajes espeluznantes de una Argentina que no carbura pero que fue salvada por una lucha incesante y por Rojo, un defensor relegado a la suplencia en el Manchester United.
“Estábamos confiados de que lo íbamos a sacar, a ganar este partido”, dijo Messi. “No esperábamos la complicación que nos empataran y salir a buscar el partido con lo que eso significa. La verdad es maravilloso poder ganarlo de esta manera.
En momentos en que el empate dejaba a la Albiceleste fuera, Gabriel Mercado envió un centro que Rojo impactó con la parte interna del botín izquierdo para vencer al arquero Francis Uzoho.
“Hubiese sido un final muy feo e injusto para todos nosotros”, señaló Messi sobre una eliminación prematura de una selección repleto de estrellas.
Con cuatro puntos, Argentina avanzó como segunda del Grupo D.