Las Grandes Ligas están investigando las acusaciones de que el antesalista de los Mellizos de Minnesota, Miguel Sanó, agredió sexualmente a una mujer que trabajaba como fotógrafa para los eventos del equipo en 2015.
Sanó emitió ayer una declaración negando las acusaciones. “Niego inequívocamente la acusación formulada en mi contra hoy: nunca sucedió”, dijo Sanó en el comunicado. “Tengo el mayor respeto por las mujeres, especialmente las que trabajan en deportes profesionales, y simpatizo profundamente con cualquier persona que haya sufrido acoso sexual. No hay lugar para ello en nuestra sociedad”.
En un tuit publicado ayer, la fotógrafa Betsy Bissen, dijo que Sanó agarró su muñeca y trató de llevarla dentro de un baño en una tienda en un centro comercial después de una sesión de autógrafos. Bissen estaba allí con Sanó, su agente y su jefe.
