José Ramírez oficialmente ha reencontrado su poder. El cañonero dominicano de los Guardianes conectó tres jonrones en los primeros seis innings contra los Medias Rojas ayer en el Progressive Field, el segundo de los cuales fue el bambinazo número 200 de su carrera.
Cleveland ganó 10-3. Ramírez llegó a la jornada con apenas seis vuelacercas esta temporada. Es la primavera vez en su carrera que el veterano conecta tres jonrones en un partido.
Dos de los cuadrangulares de Ramírez el jueves fueron contra el abridor de los Medias Rojas, Matt Dermody. El tercero fue contra Corey Kluber, ganador de dos Premios Cy Young y excompañero de Ramírez en Cleveland. Los tres cuadrangulares de Ramírez son los primeros de Los Indios desde que Edwin Encarnación lo lograra el 2 de mayo de 2018. Asimismo, se convirtió anoche en el dominicano número 32 en conseguir un juego de tres jonrones en las Grandes Ligas y apenas el segundo ambidextro en registrarlo. El otro es José Reyes.
Eloy Jiménez la sacó
Eloy Jiménez conectó un jonrón que valió la ventaja en el séptimo inning ante Michael King, y los Medias Blancas de Chicago superaron ayer 6-5 a los Yanquis de Nueva York en el primer duelo de una doble cartelera, para ampliar a cinco su número de triunfos seguidos, su mejor racha en la temporada.
Las Grandes Ligas pospusieron el duelo del miércoles ante la mala calidad del aire a raíz de los incendios forestales en Canadá. De acuerdo con el sitio Web IQAir, la calidad del aire fue de 142 puntos antes de que comenzara el encuentro y descendió a 127 aproximadamente una hora después. Una calidad que vaya de 101 a 150 se considera poco saludable para personas delicadas. Jake Burger sacudió un jonrón de dos carreras ante el abridor dominicano de los Yanquis, Luis Severino, antes de que los cubanos Luis Robert Jr. y Yoán Moncada lograran también sendos vuelacercas ante el derecho.
Robert logró un doble en el séptimo capítulo, antes de que Jiménez encontrara el siguiente lanzamiento de King (1-2) y pusiera la pelota en el bullpen de Nueva York, entre el jardín derecho y el central, para un garrotazo de dos carreras que dio a Chicago la ventaja por 6-5.
