Bad Vegan, el nuevo documental de Netflix que estrenó el 16 de marzo de 2022 es uno de los favoritos junto a El estafador de Tinder. Una vez más se narra la historia de una millonaria estafa, pero de una forma un tanto perturbadora.
Si ya eres fan de este tipo de historias basadas en hechos reales y amas los cuentos, Bad Vegan. Fama, Fraudes y Fugitivos te mantendrá con los ojos puestos en tu pantalla durante cuatro capítulos de 45 minutos de duración aproximadamente.
La historia de Bad Vegan
La miniserie cuenta la historia de Sarma Melngailis, una exitosa empresaria que abrió junto a su entonces esposo y chef uno de los restaurantes veganos más populares de Nueva York, Pure Food and Wine.
El lugar se convirtió en uno de los favoritos de famosos como Alec Baldwin, Tom Brady y Owen Wilson y su fama hizo que Sarma también se convirtiera en toda una celebridad, pues el mundo entero quería probar las delicias veganas del lugar.
El matrimonio de la empresaria con el chef Matthew Kenney se terminó y por ello la disputa por el restaurante comenzó, pero los inversionistas apostaron por ella y finalmente se quedó con el lugar.
Una vez que lo echó a andar y el éxito la persiguió, gracias al actor Alec Baldwin conoció a un misterioso tipo por Twitter llamado Shane Fox en 2011, de quien se enamoró y con quien se casó al poco tiempo.
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De acuerdo con lo que narró Sarma en el documental, con el paso del tiempo empezó a descubrir cosas turbias sobre su esposo, quien resultó llamarse Anthony Strangis, quien le dijo que realizaba misiones secretas de la CIA, que formaba parte de una sociedad secreta y que podía hacer que Leon, su perro, viviera para siempre.
Aunque parezca increíble, Sarma Melngailis cayó redondida y le creyó. Shane Fox o mejor dicho Anthony Strangis, empezó a pedirle grandes cantidades de dinero para supuestamente realizar sus misiones y Sarma se lo prestó sin pensar en el daño que le estaba haciendo al restaurante al no pagar los sueldos de sus empleados.
Todo se sale de control…
Sarma y su restaurante comenzaron a tener más y más deudas por no pagar la renta, a sus empleados y a sus inversionistas y finalmente robaron 2 millones de dólares y se convirtieron en fugitivos de la justicia hasta que por ordenar una pizza en un hotel fueron capturados.
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Supuestamente todo se debió a que el esposo de Sarma, quien era adicto a las apuestas, la convenció de hacer todo eso, sin embargo, varios testigos apuntan a que ella sabía perfectamente lo que estaba haciendo y hasta aseguran que se casó con él por dinero, ya que al inicio él mostró que tenía mucho y al final ella terminó ‘estafada’.
Después del estreno del documental que la propia Sarma promocionó en sus redes, dijo que Netflix había manipulado cierta información y aseguró que el final era engañoso, ya que ella no volvió a tener contacto con su esposo como se cuenta en la miniserie.
“Dije que el final es inquietantemente engañoso, pero aun así estoy muy agradecida por esta cobertura”, escribió en sus redes sociales.
