Kabul .- El presidente afgano, Ashraf Ghani, fue declarado este martes vencedor de las elecciones presidenciales afganas, un resultado rechazado por su principal adversario, Abdullah Abdullah, quien afirmó ser el verdadero ganador de los comicios.
El anuncio de la Comisión Electoral Independiente (IEC), que da por ganador a Ghani con el 50,64 % de los votos, llega cinco meses después de la celebración de unos comicios marcados por la baja participación y las denuncias de fraude.
El rechazo de Abdullah, actual jefe del Ejecutivo, podría abrir una crisis en la nación asiática marcada por la guerra, entre la expectación generada por el plan de reducción de la violencia de los talibanes acordado con Estados Unidos y la posible firma de un acuerdo entre ambas partes para acercar el fin del conflicto.
LA IEC DECLARA PRESIDENTE A GHANI
La presidenta de la IEC, Hawa Alam Nuristan, dio a Ghani como ganador de las elecciones presidenciales afganas celebradas el pasado 28 de septiembre.
La IEC declaró a «Ashraf Ghani, que ganó 923.592 votos o el 50,64 % de los sufragios, presidente electo de la República Islámica de Afganistán», indicó Nuristan.
En segundo lugar, con el 39,52 % de los apoyos en las urnas, quedó el actual jefe del Ejecutivo afgano, Abdullah Abdullah, mientras que el candidato y antiguo señor de la guerra Gulbuddín Hekmatyar acabó en un distante tercer puesto con el 3,85 % de los votos.
Ghani, arropado por cientos de partidarios, calificó los resultados de «victoria de la democracia» y «victoria para el pueblo afgano», en un discurso en el palacio presidencial.
«Hago un llamamiento a todos: el tiempo de la rivalidad y la competición ha acabado, nuestros brazos están abiertos para todos los afganos que creen en la República Islámica de Afganistán», declaró Ghani, al tiempo que afirmó que es hora de que el Gobierno de Kabul negocie la paz con los talibanes.
ABDULLAH RECHAZA LOS RESULTADOS
«Según los votos limpios del pueblo, el equipo Alianza y Estabilidad (la organización política de Abdullah) es el ganador de estas elecciones, y anunciamos nuestra victoria», declaró a su vez Abdullah tras conocer los resultados.
El jefe del Ejecutivo anunció que su equipo «formará un Gobierno inclusivo y con una base amplia», al tiempo que calificó estos resultados de «robo» y «golpe contra la democracia».
La negativa de Abdullah de aceptar los resultados de las elecciones recuerda a la situación vivida tras los comicios presidenciales de 2014, cuando Abdullah se negó a aceptar los resultados y desencadenó durante meses un periodo de crisis e inestabilidad política.
La crisis no concluyó hasta que con mediación de Estados Unidos se acordó la formación de un Gobierno de Unidad Nacional, con Ghani como presidente y Abdullah al frente del Gobierno.
EXPECTACIÓN ANTE EL ACUERDO ENTRE TALIBANES Y EEUU
Los resultados electorales llegan en medio de una gran expectación por la posible firma de un acuerdo entre los talibanes y EEUU, tras más de un año de negociaciones en Doha, con el objetivo de allanar el camino para acabar con dos décadas de guerra en Afganistán.
El grupo insurgente se ha comprometido con Washington a reducir la violencia durante siete días, y si cumplen su promesa podrían firmar un acuerdo final que incluya una salida escalonada de las tropas estadounidenses de Afganistán, donde permanecen entre 12.000 y 13.000 efectivos.
La fecha en que este periodo de reducción de violencia debe comenzar todavía no se ha anunciado oficialmente, aunque el Gobierno afgano indicó este martes que podría empezar en los «próximos cinco días».
El ministro de Interior afgano, Masoud Andarabi, dijo que «se espera que la fase de reducción de la violencia, que se realiza en base al acuerdo entre Estados Unidos y los talibanes, comience en los próximos cinco días».
El portavoz de la presidencia afgana, Sediqi Sediqqi, afirmó también hoy que las fuerzas afganas y las tropas estadounidenses trabajan en los «pasos prácticos» necesarios para los días de reducción de la violencia.
El Gobierno afgano prevé enviar a un equipo negociador «inclusivo y técnicamente preparado» para comenzar conversaciones directas con los talibanes, si éstos cumplen con sus promesas. Hasta ahora, los talibanes han insistido en negociar directamente con EEUU antes de hablar con Kabul.
El pasado septiembre, Washington y los talibanes estuvieron muy cerca de alcanzar un acuerdo, pero el presidente de EEUU, Donald Trump, canceló abruptamente las negociaciones en Catar tras un atentado en Kabul en el que murió un soldado estadounidense.
