Leche, huevo, pescado, mariscos, trigo, soya y frutos secos, son los alimentos más propensos a provocar alergias
Nuestro organismo tiene diferentes cuerpos de defensa que arremeten a lo que para ellos son una amenaza evidente. En esta ocasión abordaremos las alergias alimentarias. La palabra alergia viene del griego alos y ergos, alos quiere decir diferente o extraño, pero: ¿cómo son definidas por los especialistas de la nutrición estos organismos que atacan las defensas?
Para la nutrióloga clínica y pediátrica, Keila Guzmán, las alergias alimentarias son reacciones adversas a los alimentos que tienen en su origen un mecanismo inmunitario, es decir, una respuesta inmunológica como contraataque a la ingestión de un alimento en específico.
Diferencia entre alergias e intolerancias
Este término en ocasiones se puede confundir con las intolerancias que aunque se relacionan entre sí, son totalmente diferentes. Guzmán indicó que éstas dos afecciones son distintas, pero con síntomas muy parecidos. Una alergia es producida cuando el organismo entra en contacto con un alérgeno, y como método de defensa se desencadena un proceso inflamatorio mediante la producción de anticuerpos Ige y la liberación de histamina.
Algunas alergias pueden desaparecer antes de los cinco años y otras suelen permanecer toda la vida, mientras que las intolerancias se producen cuando el organismo no es capaz de digerir o procesar ciertos compuestos de los alimentos. También podemos definir las intolerancias como la reacción del sistema digestivo frente a un alimento, esto sucede a causa de un déficit de enzimas en el organismo que impide que dichos alimentos sean metabolizados de la manera correcta.
¿Cómo se manifiestan?
En el caso de las alergias la reacción en la mayoría de las personas suele ser de manera inmediata pudiendo provocar una anafilaxia hasta desencadenar la muerte, pero también pueden manifestarse 30 minutos después de haber ingerido el alimento, mientras que en las intolerancias los síntomas surgen después de consumir ciertos alimentos y de manera lenta, pueden durar hasta un día en aparecer la manifestación de los síntomas.
¿Cuáles son los síntomas que las diferencias a cada una?
Ambas presentan síntomas gastrointestinales parecidos como náuseas, vómitos, dolor abdominal, inflamación, cólicos, diarrea. A diferencia de la intolerancia, las alergias tienen signos cutáneos como son: urticaria, picor en la boca y garganta, lagrimeo, hinchazón de los labios y párpados, eczemas y enrojecimiento. Además de síntomas respiratorios: tos, sibilancia y apnea.
¿Cuáles son las alergias más frecuentes?
Los alimentos que frecuentemente producen alergia son: la leche, el huevo, el pescado, los mariscos, el trigo, la soya, los frutos secos. En ocasiones algunas frutas o verduras.
¿Cuáles alergias producen síntomas cutáneos y cuáles digestivo?
Las alergias a los huevos, pescados, mariscos y frutos secos producen síntomas digestivos y cutáneos como son los vómitos, dolores abdominales, diarrea, picor, hinchazón de los parpados y la boca y urticaria. En el caso de la leche las manifestaciones más frecuentes son las cutáneas, debido a que aparecen en más del 50 % de las reacciones.
¿A qué edad se puede presentar alergias a ciertos alimentos?
De acuerdo con la doctora, en los niños de 0-3 años son más propensos a las alergias, un ejemplo que se manifiesta en esta población es el de la leche en la edad de lactancia materna.
Según estudios realizados en EE.UU y Europa, el mundo se está volviendo alérgico, debido al aumento de estas afecciones en los adultos. ¿Pero afectan éstas al comportamiento? Guzmán afirmó que las alergias en el caso de los infantes los hacen ser irritables, hiperactivos, agresivos y ansiosos. Mientras que en los adultos puede causar depresión, hiperactividad, ansiedad, agresividad y cambios de humor.
Basándonos en nutrientes
Huevo. Carnes, pescado, Semilla de
linaza, Tofu y granos enriquecidos.
Leche de vaca. Leche de soya, almendra, coco, de avena y de cabra.
Trigo. Maíz, arroz y garbanzo.
Pescado. Chía, lino y girasol, lecitina de soya, frutos secos, quínoa, tofu.
Mariscos. Pescado azul.
Maní. Semilla girasol, soya, almendra.
Frutos secos. Legumbres, vegetales, cereales integrales y aceite de oliva.
Soya. Carnes, pescados, legumbres, huevos y granos enriquecidos.
