El presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) Luis Henry Molina Peña presentó su plan de trabajo y la visión que aspira imprimirle a esa corte y con ella, al desenvolvimiento del poder judicial.

Su discurso con motivo del Día del Poder Judicial lo concentró en lo que podrían ser sus actuaciones para contribuir a que la justicia opere de acuerdo con los tiempos, a la velocidad que demanda un mundo donde los procesos deben caracterizarse por una razonable celeridad.

Centró su atención en la llamada mora judicial. Los procesos interminables por “maniobras dilatorias injustificadas” (triquiñuelas de partes y abogados y permisividad de los jueces). O la costumbre hecha ley de una justicia marcada por la modorra. Como si el sentido solemne de la misma fuese el letargo, lo complejo y laberíntico, típico de la caracterización de Franz Kafka en El Proceso.

Su compromiso de superar la mora, convencido de que “no es posible que ciudadanos y ciudadanas tengan la vida suspendida, porque no sale una decisión de los tribunales. O que un derecho personal o económico sea vulnerado porque las medidas de urgencia para protegerlos estén en retardo”, sería de por sí un paso de avance en el sistema judicial.

Más allá, el presidente de la Suprema, con una experiencia acumulada como director de la Escuela Nacional de la Judicatura durante un largo período en la primera ola de reforma del sistema judicial, bien podría contribuir a modernizar el desempeño, de modo que haya la deseada celeridad sin menoscabo del sentido del debido proceso.

Su discurso revela su consciencia de los límites. Evitó plantear cuestiones que tradicionalmente afectan el poder judicial, como los recursos económicos, importantes para endurecer su autarquía, y con cierto sentido común, prefirió afirmar el perfil de la independencia del poder judicial en base al trabajo de los jueces como responsabilidad individual para tomar las decisiones en cada caso.

Luis Henry Molina habló con sensatez, muy consciente de la coyuntura que le ha tocado al frente de la Suprema Corte. Su plan es ayudar a que la justicia camine…

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