La acusación contra cinco de los seis imputados en el caso Odebrecht ahora pasará por otro proceso al ser declinado por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) hacia la jurisdicción ordinaria del Distrito Nacional.
Una vez el Pleno de la SCJ dé a conocer la sentencia integra el 28 de enero próximo, el expediente contra el empresario Ángel Rondón, el abogado Conrado Pittaluga, los exfuncionarios Víctor Díaz Rúa, Roberto Rodríguez y Andrés Bautista, pasará a la Presidencia de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional.
Es entonces que el presidente de la Cámara Penal de esta jurisdicción, magistrado Teófilo Andújar, mediante sorteo, designará el tribunal colegiado, de los cuatro existentes, que conocerá el caso de corrupción “más importante del país”.
Los cuatro tribunales están presididos por mujeres. El Primer Tribunal Colegiado está presidido por la magistrada Esmirna Giselle Méndez; el Segundo por Claribel Nivar; el Tercero por Arlin Ventura y el Cuarto por Ingrid Fernández.
Cuando sea apoderado uno de estos tribunales colegiados entonces la presidenta del mismo deberá fijar una fecha para iniciar el juicio.
Proceso no se retrotraerá
Surgen interrogantes sobre si el proceso deberá comenzar desde cero o continuara su curso en el juicio de fondo.
En su fallo, emitido el pasado martes, el Pleno indicó al rechazar una solicitud del imputado Pittaluga sobre que se declare la nulidad de todo el proceso en virtud de la incompetencia de la jurisdicción privilegiada, que el proceso “no puede retrotraerse a etapas ya agotadas válidamente”.
“El artículo 68 del Código Procesal Penal dispone que la inobservancia de las reglas de competencia solo producen la ineficacia de los actos cumplidos después de resuelta la cuestión de competencia, es decir, el proceso no puede retrotraerse a etapas ya agotadas válidamente; por vía de consecuencia, los actos agotados fueron realizados conforme el procedimiento instituido y aplicable en estos casos, que cambia a partir del precedente contenido en esta resolución, modificando la situación anterior y aplicando hacia el porvenir”, afirman los magistrados en su decisión.
Así también lo indicó el presidente del alto tribunal en un encuentro navideño que sostuvo con la prensa el pasado miércoles. Luis Henry Molina afirmó que “el caso Odebrecht que la SCJ declinó a un tribunal de primer grado no reiniciará desde cero”.
La declinación es para “garantizar derechos”
Al dar a conocer su decisión sobre remitir el caso hacia la jurisdicción ordinaria, el Pleno indicó que lo hizo “en procura de garantizar los derechos fundamentales y garantías procesales de las partes”. Explicó que por esto los jueces abandonaron la jurisprudencia de aplicación del denominado arrastre, que creaba el senador Tommy Galán, “restableciendo el derecho al juez natural y el respeto a la competencia excepcional de esta alta corte”.
