El director ejecutivo de Acción Empresarial por la Educación (Educa), Darwin Caraballo, sostuvo ayer que hay territorios del país que deben ser declarados en emergencia educativa como es el caso de Tamayo, en Bahoruco, donde más del 97% de los docentes reprobó en la prueba de evaluación docente y sólo un 3% alcanzó el nivel de excelencia.

“Ese distrito está en una emergencia educativa, los estudiantes que asisten tienen una situación de enorme desigualdad respecto a lo que ocurre, por ejemplo,en la provincia de Santo Domingo”, subrayó.

Caraballo afirmó que una forma de incentivar la calidad de los profesores es valorando mejor a los que alcanzan la excelencia, y puso como ejemplo al maestro Geury Ramón Sánchez, quien alcanzó la máxima calificación a nivel nacional en el pasado Concurso de Oposición Docente, equivalente a 100 puntos, y que a su entender, debería ser “venerado tanto como un pelotero”.

Sostuvo que uno de los datos alentadores de la prueba Pisa es que el 12% de los estudiantes que proviene de hogares pobres presentaron un buen desempeño. “La República Dominicana está liderando el ranking latinoamericano en estudiantes resilientes, quiere decir de estudiantes que vienen de hogares de muy bajos recursos, pero su desempeño demuestra que alcanza el más alto nivel”.

El especialista en educación atribuye ese éxito a la calidad de los docentes porque “es el maestro que inspira. Pisa establece que a los estudiantes que les va mejor son los que tienen maestros que los motivan, que los inspiran y los desafían”, comentó.

Caraballo fue entrevistado por Pablo McKinney en su programa “McKinney” que se transmite por Color Visión, los sábados a las 11:00 de la noche.

El director ejecutivo de Educa también criticó que luego del resultado de las pruebas PISA la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) haya convocado a paros de docencia, por lo que aprovechó para instar a los maestros a ser más responsables con su labor y no acatar siempre los llamados del gremio.

Afirmó que la baja calidad de la educación revelada por la prueba PISA tiene explicaciones multicausales, pero hay una que es determinante, como es la calidad de la formación docente y el rol que ejerce el docente dentro del aula.

Caraballo explicó que no se trata de docentes que estén cumpliendo con su trabajo, o que no estén cumpliendo con la tarea, sino de la metodología empleada para transmitir conocimientos.

Cabrera sugiere evaluar el sistema

Cuestionada al respecto, la ex presidenta de la ADP, María Teresa Cabrera, dijo que analizar la baja calidad educativa, poniendo el foco únicamente en el maestro, no contribuye a solucionar el problema.

En ese sentido, considera que debe hacerse una revisión integral de todos los planes educativos elaborados desde el año 1992 con el primer Plan Decenal, hasta el Pacto Educativo, firmado en el 2014, para verificar cuáles políticas se implementaron y cuáles se quedaron engavetadas, ya que muchos compromisos asumidos no han sido cumplidos.

“Los maestros tenemos que estar en medio de ese análisis integral, abiertos a reconocer que tenemos que revisarnos también, que tenemos que estar abiertos a la posibilidad de cambio en nuestra práctica y en nuestro pensamiento, pero insistir en que el problema es un factor, creo que es una apuesta que no ayuda a superar el problema”.

“Hay que revisar la gestión de las políticas”

Según Cabrera, dentro de la evaluación del sistema hay que revisar las prioridades y la gestión de las políticas, incluyendo “evaluar cómo la politiquería impacta la base del sistema educativo dominicano, y cómo frena la calidad”. Recordó que a ocho meses de la firma del Pacto Educativo, el ministro de aquel entonces, Carlos Amarante Baret nombró “de un solo plumazo” a 550 técnicos administrativamente sin llamar a concurso.

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