La respuesta es sí. Existen tres maneras en que un ciudadano puede llevar a residir a los Estados Unidos a un menor que ha sido adoptado. La primera opción es seguir los pasos del proceso de adopción siguiendo los requisitos establecidos por la convención de La Haya sobre Adopción. Si El Niño es nacional de un país parte de esta convención, este es el proceso a seguir. El padre entonces debe aplicar ante USCIS por su idoneidad para adoptar a un niño. Esta aplicación debe ser depositada antes del proceso de adopción sea culminado. Luego de ser determinada su idoneidad. El Departamento de Estado se comunicará con la autoridad central de país de asuntos de adopción e indicará que el proceso puede proseguir. Es en esta etapa que el ciudadano puede proceder a realizar la petición como adoptado de la Convención.
En el caso de que El Niño sea nacional de un país no parte de la convención, el ciudadano debe aplicar por una solicitud de tramite acelerado de petición para huérfano. Este formulario igualmente determinará la idoneidad del ciudadano para adoptar. Luego de ser aprobada esta aplicación, el ciudadano puede someter la petición para clasificar al niño como familiar inmediato. En los dos casos anteriores, el expediente es luego remitido al consulado del país de residencia del menor para culminar con el proceso.
Los ciudadanos también tienen la opción de someter el formulario I-130. Para ello el ciudadano debe tener al menos dos años de custodia legal y física del menor. Igualmente, el proceso de adopción debe haberse finalizado antes de que el menor cumple 16 años.
Los residentes, por otro lado, no pueden hacer peticiones en favor de menores adoptados bajo la convención de La Haya. Sin embargo, pueden realizarla en favor del menor a través del formulario I-130. Los mismos requisitos descritos arriba se aplican para este caso. Como verán este es un proceso complejo que requiere de la asistencia de un abogado conocedor del tema.
