El proceso de apelación a la sentencia que descargó a Arsenio Quevedo y al exregidor Ericson De los Santos Solís, de pertenecer a una red de sicariato, sufrió otro giro y quedó sobreseído, es decir, suspendido.

Esto se debe a una recusación realizada al Ministerio Público, presentada ayer formalmente previo a la audiencia, la cual se ha tratado de conocer desde octubre del pasado año, pero la misma ha sido aplazada siete veces.

En esta ocasión, el caso queda aplazado, hasta tanto la Procuraduría General de la República (PGR) se refiera a una recusación que hizo la defensa técnica de De los Santos Solís a la procuradora general de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, Yeni Berenice Reynoso, quien conoce el caso.

De los Santos Solís, a través de su defensa técnica, indicó que Reynoso “no es objetiva”, pues dijo que la magistrada está como testigo a cargo en otro proceso que tiene en otra jurisdicción.

Plutarco Jaquez, defensor del exregidor, pidió que Reynoso descendiera del estrado hasta que la Procuraduría General de la República (PGR) conozca esta recusación.

“Eso rompe de manera trasversal el principio de objetividad, en esa retenciones entonces la magistrada esta formalmente recusada ante el estamento que establece la ley”, expresó.

También, pidió que para que no se aplazara la audiencia subiera a estrado otro representante del Ministerio Público.

De su lado, la magistrada Reynoso rechazó la recusación y dijo que la misma son argumentos que buscan torpedear el proceso “como se ha hecho desde el origen de este caso”.

“No tenemos ningún causal de recusación de confinidad a nuestra Ley Orgánica que nos haga aceptar la misma”, indicó.

Señaló que solicitar que suba otro fiscal es violentar varios principios, entre ellos, el de separación de funciones.

Los aplazamientos desde el pasado años han sido motivo de queja por parte de Reynoso, quien los calificó como una táctica dilatoria de los implicados en el caso.

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