Su hijito murió de cáncer, y ella, con el diagnóstico en el sobre, fue a hablarle al cementerio. ‪“Por ti y por mi voy a luchar”.

‪Armada de una hermosa sonrisa que no la abandona y muchas ganas de vivir, Rosemary echó el pleito.

La joven expresó que la enfermedad «tocó mi cuerpo pero no mi alma»,

‪Y aquí está, bella, vital, con todos nosotros.

Posted in Destacado, País, PanoramaEtiquetas

Más de destacado

Más leídas de destacado

Las Más leídas