El presidente de la Fundación Progreso, Seguridad Social y Salud, Andrés Astacio, dijo ayer que para preservar la eficiencia y sostenibilidad del sistema de Seguridad Social y su patrimonio, el punto de partida de la atención del afiliado debe partir de un centro de atención primaria dentro de la red de las Administradoras de Riesgos de Salud (ARS).
Lamentó que en el país todavía no haya entrado en vigencia el nivel de atención primaria en el régimen contributivo, por lo que el acceso usual al sistema es a través de la atención ambulatoria especializada. “Es necesario trasladar a este nivel la condición antes citada de que el médico que refiere se encuentre dentro de la red que sirve al afiliado y que las referencias que haga también se encuentren en la misma red. Así el administrador de los fondos podría dar seguimiento a los procedimientos y garantizar la tan mencionada eficacia de estos”, dice Astacio Polanco en una misiva dirigida al director de este diario, Osvaldo Santana.
Afirma que esto obliga a las ARS a tener amplias redes de médicos contratados como prestadores de servicios, generando incentivos para las que las redes administradas por ellas sean lo más amplias posibles, “ya que no debe haber dualidades entre la administración del riesgo y la prestación del servicio”.
“Debemos de avanzar fortaleciendo las redes de prestación de las ARS y estableciendo la atención primaria como nivel de entrada a la asistencia sanitaria. Esto facilitará abordar aspectos cuya resolución es indispensable para garantizar una prestación de calidad y eficaz a todos los afiliados”.
Insiste que cuando la ley 87-01 de Seguridad Social, en su artículo 3 habla de libre de elección, lo que establece es que los afiliados tendrán derecho a seleccionar a cualquier administrador y proveedor de servicios y cambiarlo cuando lo consideren pertinente. “Es decir, en el plano normativo este derecho se limita a escoger el administrador de riesgos de salud, por consecuencia la red de prestación de éste”.
