Es impresionante cómo puede la sinrazón anidarse en la mente humana, al extremo de considerar un ataque a la libertad de expresión lo que se afirma en el derecho. El desconocimiento de Altagracia Salazar y Edhith Febles de la potestad de la empresa CDN Televisión, de Multimedios del Caribe, de designar a un profesional de la comunicación como parte del equipo de “Enfoque Matinal”, es absurdo. Ellas no están obligadas a trabajar junto a nadie. Es su libre albedrío, pero el ejercicio de las facultades de la otra parte no tiene que verse como una maniobra gubernamental. Es maniqueísmo puro. Es también intolerancia y empoderamiento excesivo de un bien ajeno con el cual tenían una relación contractual.
