Región Este vive las secuelas de María

Tras ser fuertemente afectada por los efectos del huracán María, la provincia La Altagracia desde ayer siente un respiro, pero pese a esto aún vive en carne propia las secuelas que les dejo el fenómeno atmosférico, de categoría tres.

Aunque las lluvias en la zona se redujeron considerablemente, comunidades quedaron al desnudo y desprotegidas

Provincia La Altagracia.- Tras ser fuertemente afectada por los efectos del huracán María, la provincia La Altagracia desde ayer siente un respiro, pero pese a esto aún vive en carne propia las secuelas que les dejo el fenómeno atmosférico, de categoría tres.

Y es que aunque las lluvias se han reducido de manera considerable, los ríos han regresado a su nivel y las inundaciones sean pocas, el desnudo en que quedaron algunas comunidades de la referida provincia es una realidad que no se puede esconder.
En horas de la mañana de ayer, residentes del barrio La Florida, -uno de los más golpeados en el municipio de Higüey por los intensos aguaceros y las ráfagas de viento-, reclamaron la atención inmediata de las autoridades.

Los comunitarios pidieron, tanto de la gobernación como de la Presidencia de la República, alimentos, crudos o cocidos, colchones, sábanas y la reconstrucción de sus viviendas. Dijeron sentirse desamparados y devastados, pues lo cierto es que el lodo, la humedad y los ajuares húmedos, eran quienes los acompañaban.

Todos coincidieron en que se hace necesaria una intensa jornada médica, debido a que temen que los niños que habitan en la zona -que son los más vulnerables- , sean afectados con los brotes de enfermedades que dejan las inundaciones.

Gobernador

En respuesta a esto, el gobernador de La Altagracia, Ramón Güílamo, aseguró al ser entrevistado por elCaribe, que las acciones post María estarían dirigidas y enfocadas al auxilio de esas zonas que quedaron a la intemperie.

“Lo primordial es darle asistencia sobre todo a las partes vulnerables, en lo que tiene que ver con viviendas, lo que tiene que ver con las personas que, por ejemplo, se les inundó la casa, ver los ajuares, los colchones, revisar los niños y, sobre todo, la parte de salud, porque la parte de salud es ahora que viene”, indicó.

Para hacer frente a eso, el dirigente provincial se trasladó en compañía de personal del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) y varios camiones del Plan Social de la Presidencia, a realizar un levantamiento de los lugares más críticos y a proporcionar raciones alimenticias. Resaltó que el Instituto Nacional de la Vivienda (INVI) trabajaría en las casas que perdieron el techado. “Nosotros estamos reforzando la entrega de alimentos, pero hay que tener en cuenta que hay personas que están en sus casas, no están en albergues… a las personas que están en las riberas de los ríos les estamos entregando alimentos desde ayer (el jueves) nosotros nos pasamos el día en eso, reforzando”, afirmó.

Ambiente

Durante todo el día, el pueblo de Higüey y también el de Bávaro, estuvieron muy activos, pues los brigadistas del MOPC se mantuvieron todo el tiempo viabilizando y acondicionando las calles y carreteras.

El comercio y la actividad cotidiana volvieron a ser los mismos. Los vendedores ambulantes se veían por todas partes. Los colmados, tiendas y demás, desde temprano abrieron sus puertas.

En Bávaro-Punta Cana las cosas marchaban normales, la mayoría de letreros, vallas, y postes de luz fueron levantados. Además de que la energía eléctrica fue repuesta en casi todos los sectores y sólo estaban a la espera de que le suministraran agua potable para la limpieza de los trastos de las casas y negocios.

Pérdida

Dos viviendas fueron aplastadas al caerle una pared durante un deslizamiento de tierra en el barrio 21 de Enero, en el municipio de Higüey, donde afortunadamente no hubo pérdidas humanas.

Teodoro Mejía, un señor de 84 años, quien era propietario de una de las viviendas de las que ayer sólo recogían los escombros, narró que el hecho ocurrió a las 6:00 de la mañana del jueves cuando en la casa, -donde habitaba con su esposa y dos hijas de su compañera- se encontraban en sus camas.

Dijo que sólo escuchó un estruendo y de un momento a otro se encontraba debajo de las tablas, pedazos de blocks y planchas de zinc. Contó que de inmediato los vecinos lo auxiliaron.

“Eso fue un milagro de Dios que nosotros quedáramos vivos, nos sacaron como culebras de bajo de todo esto”, relató el hombre con la mirada aún de asombro.

Durante un recorrido por barrios de Hato Mayor y Miches, encabezado por el ministro de Defensa, teniente general Rubén Darío Paulino Sem, la directora del Plan de Asistencia Social de la Presidencia, Iris Guaba, garantizó que el Gobierno dominicano no descansará hasta devolver la tranquilidad a cada una de las familias afectadas.

Refugiados
El director provincial de la Defensa Civil, Fernando Castillo, informó que ayer 900 personas todavía seguían albergadas.

Posted in PaísEtiquetas

Más de panorama

Más leídas de panorama

Las Más leídas