El 70% de las empresas en la República Dominicana son familiares y de estas solo el 30% sobrevive a la transición de la primera a la segunda generación.La afirmación la hizo el presidente de la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (Anje), Eugene Rault Grullón, durante el segundo seminario de empresas familiares “El poder de una visión” organizado por la entidad.
El objetivo de estos seminarios es abordar el tema de la sucesión en las empresas para asegurar su sobrevivencia en el tiempo.
“Entendemos que es un tema de comunicación y no tener las reglas claras, cuando ocurre la sucesión no se está en cuestionamiento de quién está en control, sino que se hace un plan alrededor de eso, no solo esperar que ocurra”.
Rault expresó que la situación preocupa a la Anje porque es un tema que viven los asociados y “habiendo un 70% de empresas familiares, quisiéramos preparar a nuestros socios para revertir esa realidad”. El empresario reconoció que en algunas familias hay resistencia al cambio y por eso aboga por la planificación.
Sobre esa cuestión habló Ferran Fisas, director del programa “Transmisión”, que busca asesorar empresas familiares en temas de sucesión.
Fisas consideró que entre los principales retos que deben presentar las empresas familiares están relacionados con asumir cambios, ya que las generaciones primeras hacen resistencias.
“Incorporar las nuevas generaciones en todas las etapas del desarrollo de las empresas, las personas de casi 60 años, dentro de poco no sabremos qué está sucediendo, debemos incorporar a los jóvenes de inmediato o la pasaremos mal”, dijo Fisas.
En tanto que el presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), Pedro Brache, señaló la capacitación, los valores y el ejemplo como los métodos que deben emplear las empresas para ser exitosas en el tiempo. “La empresa familiar no es un feudo, hay que ganarse los espacios como los demás empleados”, expresó Brache.
