Maestros pasan travesía para llegar a escuela

Imbert, Puerto Plata. Profesores de la escuela Ramón Antonio Morfe deben desviarse por montes para llegar hasta el centro educativo, debido a que hace cuatro meses se cayó el puente colgante que comunicaba con Rincón de Bajabonico Arriba.

Imbert, Puerto Plata. Profesores de la escuela Ramón Antonio Morfe deben desviarse por montes para llegar hasta el centro educativo, debido a que hace cuatro meses se cayó el puente colgante que comunicaba con Rincón de Bajabonico Arriba.Los educadores deben recorrer más de tres kilómetros entre zona montañosa, luego de que en noviembre colapsara el puente colgante que comunica a la comunidad Los Félix de Imbert con Rincón de Altamira, pertenecientes a la provincia Puerto Plata. Las ramas sirven de sostén para que los maestros puedan desplazarse hasta el centro educativo.

Aunque las autoridades de Obras Públicas trabajan en la canalización del río, con la colocación de muros de gaviones y una pasarela que permita el paso, todavía los trabajos no están concluidos. En ese lugar la crecida del río Bajabonico destruyó un cuartel policial, tres viviendas, un colmado y una carnicería.

“Los maestros vienen hasta la comunidad Los Félix y desde aquí tienen que pasar con zapatos en manos y luego caminar entre lomas para llegar hasta la escuela que se encuentra alejada”, expresó Johnny Bonilla, residente en la zona. El centro educativo cuenta con una matrícula de aproximadamente 150 alumnos. Bonilla espera que puedan agilizar los trabajos de terminación del puente para poder comunicarse desde un sector hacia el otro.

“Esta gente con las pasadas inundaciones duraron tres meses para poder comunicarse con esta parte y comían con lo que apareciera, debido a que con la caída del puente quedaron aislados, esperamos que pronto el paso sea restablecido”, expresó Silvestre Estrella.

Mientras los que viven del motoconcho también se ven afectados por la falta de una pasarela que permita desplazarse hasta Rincón de Bajabonico Arriba.

En la comunidad Los Félix, también expresaron preocupación, debido a que la escuela primaria Félix Henríquez fue levantada a escasos metros de río y temen que una nueva crecida pueda arrastrarla.

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