Santiago. Una nueva notificación, esta vez de las autoridades municipales y de Medio Ambiente, para desalojar a los propietarios de negocios y viviendas en el improvisado barrio Nueva York Chiquito, a orillas del río Yaque del Norte, ha encontrado el rechazo de los ocupantes.El ultimátum establece como plazo hasta el 13 de enero para que dueños de colmados, recicladoras, metaleras, puestos de ventas de baterías, de instalación de gas y hasta una agencia de venta de autos, desocupen la ribera del Yaque. También la ruta L, que ofrece sus servicios desde el casco urbano hasta la comunidad de Matanzas y otros negocios han sido instalados en la zona, ubicada frente al barrio Nibaje. La barriada tiene aproximadamente 20 años de formada y ya superan las cien viviendas construidas, incluso a escasos metros de las aguas del Yaque.
“Yo no sé porqué se han empecinado con nosotros. Aquí las granceras y grandes empresas sacan arena del río, hacen lo que les da la gana y Medio Ambiente no hace nada”, expresó Julián Rosario, propietario de un negocio de instalación de gas. En un trayecto de prácticamente un kilómetro de la avenida Mirador Yaque o Circunvalación, como es conocida esa vía, se contempla en principio desalojar a 20 puestos improvisados y posteriormente las viviendas. Juan Antonio Alcántara, vicepresidente de la junta de vecinos, dijo que lleva 25 años en ese lugar donde decidió construir su casa y ha criado su familia, por lo que para desalojarlos se requiere primero de un plan de traslado a un lugar seguro.
Al final de la gestión del exalcalde Gilberto Serulle, fue levantado un tercer censo para determinar la cantidad de familias que habitan el barrio de Nueva York Chiquito y llevarlos a unos terrenos donados en el distrito municipal de Hato del Yaque.
