Chocolatito González derrota por paliza al boricua Arroyo

El vaticinio se cumplió: Germán “Chocolatito” González, invicto boxeador nicaragüense”, pulverizó la noche de este sábado al puertorriqueño McWlliams Arroyo y de esa manera  revalidó su corona del peso mosca versión Consejo Mundial de&#823

El vaticinio se cumplió: Germán “Chocolatito” González, invicto boxeador nicaragüense”, pulverizó la noche de este sábado al puertorriqueño McWlliams Arroyo y de esa manera  revalidó su corona del peso mosca versión Consejo Mundial de Boxeo (CMB).

La pelea, transmitida  para Latinoamérica y la región del Caribe por el canal SPACE de Argentina,  fue fácil para el monarca de las 112 libras. Fue una victoria por paliza.

Los tres jueces dieron una votación amplia a favor de Chocolatito González: 120-108, 119-109 y 119-109. Este periodista anotó en su tarjera 120-108, es decir, todos los asaltos (12) también para el invicto púgil de Nicaragua que mejoró su foja en 45-0 con 38 triunfos por nocaut.

El gran mérito de Arroyo, quien trabajó todo el trayecto con mucho pundonor, es que se mantuvo de pie, no perdió por nocaut como esperan los fanáticos del noca y los expertos.

Desde que comenzó la riña hubo un solo hombre encima del cuadrilátero: Chocolatito González quien ofreció una exhibición de boxeo.

Sólo en el primer round,  Arroyo no fue vapuleado. En el primer capítulo el boricua hasta intercambió puños con el campeón mosca cemebeísta, aunque nunca ludo llegar sus golpes anhelada con precisión.

A partir del segundo asalto el nicaragüense, con efctivas combinaciones, se hizo dueño del ensogado. Conectó con autoridad combinaciones de ganchos, recto cortos y el oppercut…en los rounds nueve y diez casi envía a la lona al puertorriqueño, pero éste soportó estoicamente la bestial ofensiva.

Una rapidez relampagueante

Chocolatito González, quien también fue monarca de las categorías paja y minimosca, enseñó una rapidez relampagueante. Conectaba  sus golpes rápidos desde todos los ángulos. En toda la pelea arrinconaba al boricua y lo combinaba con ganchos y rectos.

Fue tan feroz y técnico que Arroyo no pudo neutralizarlo…el boricua siempre peleó a la ofensiva, porque no quería los puños del campeón lo devastaran.

Pese a su baja estatura (cinco pies y cuatro pulgadas), Chocolatito González también fue eficiente en el combate a la media y larga distancia…manejó con maestría su mano izquierda en jab que llegaba fácil a la cara de Arroyo.

Arroyo, cuatro pulgadas más alto que el nicaragüense, no logró encajar con autoridad su jab…todo lo contrario, quien manejaba en positivo el jab siempre fue Chocolatito González.

 En el último round se notó que el excelente peleador nica, que la mayoría de los expertos lo sindican como el mejor boxeador de la actualidad libra por libra, buscaba el nocaut.

Arreció su ofensiva pegando a los anos bajos y rostro del boricua. Sus puños estaban explosivos, pero no vio cristalizado el nocaut. Arroyo demostró tener un gran poder de asimilación, aunque terminó la pelea con el rostro magullado.

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