Como cada año, Acromax Dominicana celebra, con su equipo comercial, la culminación de otro período exitoso.
Esta vez el lugar seleccionado fue el Zipline Park, donde se reconocieron los miembros del equipo más destacados y se realizaron diversas dinámicas enfocadas en trazarse metas y objetivos para ser cumplidas en este nuevo período, utilizando como slogan: “2016 un año que promete”.
«Hoy podemos dar gracias por concluir con nuestros objetivos del 2015. Elegimos el escenario de este parque de aventuras, porque nuestro enfoque es mantenernos unidos para superar todos obstáculos que se presenten y volver a celebrar el alcance de nuestros objetivos. El 2016 es un año que nos presenta una nueva promesa y vamos a lograrlo», expresó Karil Taveras, directora Comercial de Acromax, durante el encuentro.
“El objetivo del encuentro es buscar la confrontación de ellos mismos, de que ¡Sí se puede!, se pueden dar mejores resultados, catalogando este año como prometedor, y retador; así mismo fomentarles la seguridad de que como equipo tienen el potencial para lograrlo, dando los mejores resultados, es el lineamiento de esta prestigiosa empresa farmacéutica”, agregó Taveras mediante un.
Las actividades que fueron realizadas en el parque para aventura extrema, contaron con los equipos formados por ejecutivos y empleados del área comercial de Acromax Dominicana, los cuales estuvieron representados por los colores: negro, rosado, naranja y azul, donde cada grupo se las arreglaba para mostrar sus destrezas durante las distintas dinámicas realizadas en el transcurso de la tarde.
Los cuatro equipos participantes durante la jornada, se distinguían con nombres como: “Las Divas de aquí”, “El Equipito”, “Los Gladiadres”, “Los Guerreros”. Cada conjunto se rotaba para realizar las diferentes actividades de peripecias como la pared de escalar, la tirolina, la torre de Hanoi y librar al mundo de una tragedia con los Coach Carlos Núñez y Antonio del Carmen, quienes dirigieron estas enmiendas.
Una de las actividades a destacar fue “la pared de escalar”, en ésta, los participantes subían peldaño a peldaño hasta llegar a la cima y luego trepar una soga por un recorrido. La finalidad de la escalada es que cada persona al momento de treparla cuente con un equipo que le permite evolucionar con toda seguridad, dejando ver que en la unión está la fuerza.
Mientras que “La Tirolina” consistía en primero caminar por escaleras suspendidas en el aire para luego deslizarse por una soga hasta llegar a la meta. En este viaje los participantes hicieron un recorrido de 1,300 metros de longitud y 150 metros de desnivel, dándoles una experiencia donde la descarga de energía y emociones fueron evidentes.
