Santiago. Aunque la diferencia en las votaciones para elegir el candidato a la alcaldía de Santiago fue de más de un 20%, el perdedor no lo reconoce y el ganador aún no celebra.El accidentado proceso realizado el pasado 13 de diciembre puso de relieve las profundas diferencias que existen entre los peledeístas.
En la agitada campaña, muchos de los dirigentes no pudieron ocultar su pasión y se fueron de un solo lado, cuando todos esperaban que fueran parte del equilibrio. A pesar de que en el último boletín que dio a conocer la Comisión Electoral del Partido de la Liberación Dominicana, Abel Martínez obtuvo un 61.81% y Ramón -Monchy- Rodríguez un 38.19%, aún no proclaman al ganador y aparentemente todo ha quedado sujeto a la revisión de resultados en mesas del sector El Ciruelito, donde además de un muerto, hubo algunas irregularidades.
En este barrio, Herasmo Antonio Medina Espinal, quien de acuerdo a las informaciones era un seguidor de Abel Martínez, perdió la vida de un disparo mientras defendía una urna que supuestamente un grupo armado quería llevarse a la fuerza.
El victimario fue identificado, apresado y sometido a la justicia, aunque aún no se ha dicho qué hacía en este lugar, con quién andaba y cuál era su verdadero objetivo.
Pasadas las votaciones y el avance de los resultados, seguidores de Monchy Rodríguez convocaron a una rueda de prensa para denunciar irregularidades y pedir a la Comisión Política una investigación del “viciado proceso”.
En esa ocasión, Rodríguez no hizo acto de presencia, pero fue días después cuando emitió algunas declaraciones, pero para llamar a la reconciliación, no para reconocer o pedir investigar resultados.
Con la llegada del nuevo año, solo se han visto algunos afiches de Abel o mensajes en las redes en los que agradece a Santiago haber votado por él. Mientras, el equipo de Monchy daba a conocer también en las redes sociales los saludos de Año Nuevo que le daban sus miles de seguidores.
La tensa relación que se percibe en el peledeísmo en Santiago se repite en otras localidades del país donde ha habido cuestionamientos y fricciones a consecuencias de los resultados de las primarias.
San Cristóbal ha sido de los más llamativos, lo mismo que Santo Domingo Norte, donde hay un virtual tranque y las autoridades del PLD no transparentan la situación.
En Santiago el PLD se mece en una “calma chicha”, tranquila y desesperante para sus militantes.
