La piel, después de quemarse con el sol, con simples trucos caseros puede volver a tener su suavidad y color natural.Tras días de exposición a los rayos del sol, la piel suele maltratarse; y es que muchas veces detrás de ese colorcito moreno que has adquirido, se esconde una tez seca y rugosa e irritada. Si tu piel ha sufrido una sobreexposición al sol y como consecuencia ahora sufres por la aparición de estas quemaduras, existen diversos trucos caseros que pueden devolverle la lozanía perdida a tu piel.
Georgina Pérez Cairo, dermatóloga, para calmar el dolor que causa la irritación, producida por el sol, recomienda tomar mucho líquido. “Cuando sufrimos de insolación, no solo la piel sufre de quemaduras, sino que nuestro cuerpo se deshidrata. Por tanto, asegúrate de reponer líquidos bebiendo mucha agua. Estar bien hidratado ayuda a lograr una recuperación más rápida”, dice.
El sol no solo reseca y daña la superficie de la piel, también afecta a las células y los vasos sanguíneos, ocasionándoles gran pérdida de humedad. Los baños y compresas frías pueden hacer que te sientas mejor, pero también pueden llegar a afectar la humedad de la piel lesionada resecándola más. Para evitar tales consecuencias, aplica una crema hidratante a base de aloe y vitamina E, inmediatamente después del baño. De ser posible, coloca la crema hidratante en la nevera antes de usarla.
La especialista también aconseja aplicar yogurt en todas las zonas afectadas, enjuagar en una ducha de agua fría y luego secar con cuidado la piel dando ligeros golpecitos.
Dice que una buena idea es llenar la bañera con agua fresca y agregar dos cucharadas de bicarbonato de sodio. Remover y lavar la zona afectada con esta agua. Repetir el proceso tres veces al día. En vez de secarse con toalla, dejar que la solución se seque sola en la piel. Este remedio alivia las molestias, rehidrata el área quemada y facilita su recuperación.
Por otra parte, añadir avena al agua de baño es otro remedio efectivo para calmar el dolor que causa este tipo de quemaduras. Llena la bañera con agua bien fresca, no con agua fría porque puedes provocarle un estado de shock a tu cuerpo. No utilices las sales de baño, ni aceites, ni baños de burbujas. En su lugar, utiliza media taza de avena y mézclala con el agua antes de introducirte en ella. Al igual que con el bicarbonato de sodio, deja que tu cuerpo se seque con el aire, y no se deben limpiar los restos de avena de la piel.
Las quemaduras de sol a menudo afectan mucho la piel de zonas como la línea del bikini, por debajo de las nalgas o alrededor de los senos y las axilas. Luego, estas quemaduras tienen que enfrentar todos los días el roce con los sujetadores y ropa interior ajustada, lo que provoca una irritación mayor. Para aliviar las rozaduras, cubre el área quemada con polvo de almidón de maíz o maicena. Nunca apliques vaselina o aceites, solo agravarán la situación.
Trata de no maltratar más tu piel
Definitivamente, no utilice una esponja de baño, mejor acaricia tu piel suavemente con una toalla. En caso de que te sientas tentado a quedarte en la bañera durante horas, no tomes un baño de tina, en su lugar toma una ducha fría, porque irónicamente, el remojo en exceso puede causar o agravar la sequedad de la piel, incrementando el prurito y la descamación .
