La fruta de temporada

Durante estas fechas se consumen muchas frutas tradicionales de la temporada, pero la más popular en el paladar de los dominicanos es la manzana, que además de tener un delicioso sabor, es también utilizada para ornamentar las mesas de los festejos&#82

Durante estas fechas se consumen muchas frutas tradicionales de la temporada, pero la más popular en el paladar de los dominicanos es la manzana, que además de tener un delicioso sabor, es también utilizada para ornamentar las mesas de los festejos pascueros.La variedad de esta fruta del tipo pomácea, como se conoce en botánica, es amplia. Entre ellas figuran la Red Delicius, la Fuji, la Reineta y la Royal Gala. Las hay en color amarillo, verde y rojo, pero, sin duda, la roja sigue siendo la preferida de muchos. Las de este tipo tienen la particularidad de que, a diferencia de las amarillas, aportan menos calorías.

Algunos especialistas en nutrición recomiendan consumir la manzana con su cáscara pues en ella se encuentra la fibra insoluble, que aporta a la actividad intestinal y ayuda a mantener los músculos intestinales en mejor estado.

Para consumirla de una manera diferente en estas fechas, puedes hacer una receta de buñuelos de manzana, la cual es muy fácil de hacer.

¿Qué nececitas? 250 gramos de harina; 100 gramos de azúcar; 15 gramos de levadura prensada; 2 litros de agua y 2 copas de coñac. También se requiere de sal, canela, 4 manzanas y aceite.

Luego, solo tienes que pelar las manzanas y cortar en rodajas de medio centímetro. Colocar en un recipiente hondo, rociar con el azúcar y dos copas de coñac y dejar en maceración durante una hora.

En otro recipiente, desliar la levadura con el agua templada, agregar la harina y formar una masa con la cuchara. Sazonar, agregar el jarabe de las manzanas con el coñac y el azúcar, mezclar bien y tapar. Dejar en lugar templado y se deja elevar la masa al doble de su volumen.

Secar con un paño las rodajas de manzana, pasar por harina y envolver en la pasta preparada. Ir echando en la sartén con abundante aceite caliente hasta que estén muy doraditos. Déjalos reposar y espolvoréalos con azúcar glas y canela.

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