Currículo y tanda extendida(1 de 2)

Dentro de las iniciativas de mayor impacto público del proceso social y político de compromiso de mejora con la calidad de la educación que vive la República Dominicana, podemos señalar la política de Tanda Extendida. El presente gobierno ha…

Dentro de las iniciativas de mayor impacto público del proceso social y político de compromiso de mejora con la calidad de la educación que vive la República Dominicana, podemos señalar la política de Tanda Extendida. El presente gobierno ha articulado un proceso de construcción de aulas en toda la geografía nacional con el propósito de completar la cobertura universal de la educación primaria, provocar el descongestionamiento actual de los planteles y, obviamente, abordar la demanda de nuevas infraestructuras hacia un nuevo sistema de 8 horas de jornada escolar. Para el próximo año, se aspira a que el 80 % de las escuelas funcionen con este nuevo modelo.

Las implicaciones de una jornada extendida no son únicamente nuevos centros e inserción de docentes al Sistema, amén de los beneficios de alimentación y seguridad que ganan los niños. La concepción de un currículo, que comunique debidamente los principios y rasgos esenciales de la educación, ha sido imperativo en los países donde se ha implementado con éxito el modelo.

En nuestro país, afortunadamente, la decisión de tanda extendida coincide con un proceso de revisión y rediseño curricular que desde el año 2012 está llevando a cabo el Ministerio con apoyo de especialistas y de algunas universidades nacionales.

Este proceso, bien llevado hasta el momento, habrá completado para este verano la revisión y la propuesta para los niveles Inicial y Primario, según la reestructuración del Sistema recientemente aprobada. Un diseño concebido desde la perspectiva constructivista del desarrollo y el aprendizaje, y escrito por competencias.

Concomitantemente, al rediseño curricular de los niveles antes citados, se han desarrollado otros elementos del Sistema con la buena intención de conformar una estructura de calidad que comience a garantizar mejores aprendizajes de nuestros estudiantes.

Se ha propuesto un Modelo Pedagógico, como “una ruta confiable que oriente los procesos de enseñanza y aprendizaje y de organización de la escuela” y se ha organizado el tiempo de clase en unos tiempos pedagógicos muy particulares. Ahora bien, completado este primer año de implementación piloto en los tres primeros grados, el proceso debe ser objeto de una evaluación responsable con miras a hacer los correctivos de lugar a tiempo. Mucho esfuerzo, público y privado, abundantes recursos materiales y sobre todo, una generación de niños están en juego. l

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