Una auténtica road movie. La vida de un viaje de emigrantes forzados atrás de una mejor vida. Latinos que enganchan sus cuerpos en el lomo de trenes de carga de mercancías del gran capital, y van de “bola en bola”. Pero en cada parada, en cada secuencia, en cada capítulo de vida, van quedando atrás sus propias existencias, o las de sus iguales, las de compañeros de viajes, y al final, con esa escena paradigmática del final, se acercan apenas a un despojo de sí mismos. No puede haber mayor desgracia para una juventud que vemos retratada en este inigualable filme. En pos del Norte (USA) se quedan literalmente sin norte. Todo lo vemos en un tono narrativo cuasi documental y es como si lo viéramos por vez primera, de un momento a otro vemos como esos jóvenes se desmoronan en su frágil adolescencia. Es un filme, por el modo de enmarcar la historia –con rigor y sensibilidad de inteligente cine-, es una obra iluminada, trascendente, impar. Los viajantes ilegales, tanto los protagonistas como los “extras”, nos relatan la lucha de sobrevivencia y tragedia de cualquier pueblo al sur del planeta.
El guión está repleto de giros y regresiones. La historia avanza y al mismo tiempo vemos el saqueo de los personajes en cada avance. Siempre una tragedia de uno supera a la anterior en una vorágine que no parece tener fin. No cae ni se manifiesta en ningún instante como un filme que procura la emoción fácil o alzar sentimientos de conmiseración por estos jóvenes. No hay, en su madurez de buenas tramas, cualquier intención de patetismo o atenuación conmovedora. A la vida que se muestra ingrata va una historia de solidaridad en la desgracia, pero al mismo tiempo de necesidad de sobrevivencia, solo que satisfacer esas esperanzas se torna maquinal, como androides continúan el rumbo en un mundo desigual e injusto. El filme en su estrategia narrativa se sitúa en la estética naturalista y en el uso de un elenco sin experiencia con lo que se acerca al espectador para crear en él una dimensión de la realidad psicológica, interna de cada personaje, y logra suplir dos conflictos a la historia: uno interno entre el grupo y otro externo que modifica sus vidas.
HHHH HH Dirección: Diego Quemada-Díez. Guión: : Lucía Carreras, Gibrán Portela, Diego Quemada-Díez. Duración: 110 minutos.
