La Romana.-El Juzgado de la Instrucción Permanente impuso prisión preventiva por tres meses a los dos hombres acusados de quemar el rostro de una joven con «ácido del diablo» y garantía económica a la mujer que habría pagado para el hecho, la cual está embarazada.
Las medidas de coerción se ordenaron contra Víctor Manuel del Rosario de Aza y Yuly Ventura Pérez, así como la haitiana Landi Matos, quien deberá pagar una fianza de 300 mil pesos.
La juez Linsay Avelino acogió en parte la solicitud de la fiscal Jennifer Acevedo y del abogado de los querellantes, Paulino Jiménez Aquino, quienes pidieron prisión preventiva para los tres imputados por el caso de Yessica Fulgencio.
Sin embargo, Acevedo reconoció que «fue una decisión apegada a lo que establece el Código» Penal Dominicano, basándose en que la barra de la defensa presentó una prueba de embarazo de la prestamista Matos.
La Fiscalía presentó en esta fase certificados médicos de la joven Fulgencio y del motoconcho Juan Severino Guzmán, quien identificó a los actores del hecho.
Severino Guzmán también resultó afectado con el peligroso líquido lanzado en el municipio de Villa Hermosa, supuestamente por celos.
La defensa satisfecha
De su lado, la abogada de la señora Matos, Digna Yan Severino, sólo se limitó a justificar que la decisión de la jueza fue en virtud de su estado de embarazo.
Abogado querellante
Mientras que Paulino Jiménez Aquino proclamó que “nadie megarantiza que Landi Matos no decida escapar del país, por lo que representa peligro de fuga”.
Familiares indognados
En lo que atañe a los familiares de Yessica Fulgencio, madre de cinco hijos, no dejaron de expresar indignación.
«Quien me garantiza que no atentará de nuevo contra mi hija», manifestó doña Elsa Jiménez, de quien dijo que sufre un drama emocional y psicológico terrible. «No se puede ni cerrar una ventana en la casa».
Motivos
Yessica Fulgencio no pudo acudir al tribunal porque fue llevada a curar a un centro médico de Santo Domingo.
Pero anteayer, luego de que la audiencia fuera aplazada, la joven pidió justicia y aseguró que fue por celos que la mujer del exmarido suyo pagó a dos hombres para cometer el hecho.
«Yo nunca les hice nada. {…} Yo tengo una hija (de dos años) con su marido», reveló la joven, aún con el rostro vendado y cubierta con una toalla.
Agregó mientras bajaba lentamente los escalones del Palacio de Justicia de La Romana que «ella me dijo que si me podía matar, ella me iba a mandar a matar.
