¿Eres candidato para una cirugía bariática?

La tendencia a estar “en forma” es producto de las exigencias de la sociedad moderna de tener una figura esbelta y bien definida.

La tendencia a estar “en forma” es producto de las exigencias de la sociedad moderna de tener una figura esbelta y bien definida. Pero de un tiempo a la fecha, la gente está cada vez más consciente de lo importante que es llevar una dieta balanceada y tener una rutina de ejercicio en pro de una mejor calidad de vida.

Para lograr el cometido, la mayoría recurre a dietas rápidas y sin ningún tipo de supervisión de un especialista que le ayude y oriente; otros tantos procuran hacerlo por la vía correcta con nutricionista o endocrinólogo y un entrenador como guías; mientras que un número creciente de personas están optando por una medida más drástica, como lo es la cirugía bariática.

La obesidad trae consigo una larga lista de padecimientos que afecta el bienestar físico y emocional de la persona, que de no tratarse a tiempo puede llegar a tener consecuencias graves. Por ejemplo, la diabetes tipo 2, cuyo desarrollo puede deberse a un mínimo de actividad física, una alimentación cargada de excesos y el sobrepeso.

Cuando una persona es diagnosticada con diabetes, frecuentemente siente la sensación de desánimo, de incertidumbre y de temor. Pero tranquilos, todo en la vida tiene una solución. En el caso de la diabetes tipo 2, la variante más común de esta enfermedad, ésta se produce cuando el organismo no produce suficiente insulina o las células no identifican la insulina, sustancia necesaria para que el organismo pueda utilizar el azúcar.

Una alternativa en pro de la salud

Según los especialistas, quienes han sido diagnosticados con esta enfermedad deben tener un cuidado especial, ya que el organismo no puede utilizar la insulina adecuadamente. Pero la medicina moderna les ofrece la posibilidad de tener una vida con salud y plenitud por medio de alternativas médicas que controlan los niveles de glucosa en el organismo.

Luis Alfredo Betances, director del Instituto Bariátrico, entidad que recientemente celebró su décimo aniversario, explica que entre esas alternativas, se encuentra la cirugía metabólica, procedimiento avalado por todas las Sociedades Científicas como el Instituto Nacional de Salud de los Estados Unidos, la Sociedad Americana de Cirugía de la Obesidad y la Asociación Americana de Diabetes, para aquellos pacientes que padecen de diabetes tipo II y obesidad severa (con un índice de masa corporal mayor de 35).

Betances considera que: “Esta es una vía para mejorar los efectos en los pacientes de la diabetes tipo 2. Se trata, sin lugar a dudas ,de una innovación en el campo de la medicina y se deriva de la Cirugía Bariátrica y consiste en realizar dos procedimientos dependiendo del caso: un Bypass gástrico, una de las técnicas de Cirugía Bariátrica de tipo restrictivo y malabsortivo; o bien el Bypass Duodeno-Yeyunal, que consiste en excluir el duodeno y el segmento proximal del yeyuno (primeras porciones del intestino delgado) del tránsito de los alimentos. Se puede combinar con la Manga Gástrica y produce cambios en hormonas y receptores ubicados en esta área, que tienen que ver con el control de la glicemia”.

Quizás consideres que pasar por este procedimiento quirúrgico es muy riesgoso. Pero según el experto  en este tipo de cirugía, se ha reportado remisión de la diabetes en un 85% de los casos y mejoría en un 15%.  Lo que representa una gran mejoría en el paciente.

“Está indicada para pacientes que por algún motivo no pueden llevar de manera correcta su tratamiento para la diabetes o aquellos que no logran controlar el nivel de glucosa”, agrega Betances, quien tiene  más de 15 años de experiencia en cirugía general.

Los resultados, luego de la cirugía, demuestran disminución, incluso ausencia, de la necesidad de medicación para la diabetes, dependiendo esto de cada caso en particular. Se reducen los riesgos cardiovasculares, valores de lípidos en sangre y necesidad de medicación anti hipertensiva.

En cuanto a la actividad física, investigadores del Centro Médico de la Universidad de Texas, en Estados Unidos, descubrieron que las personas que se han sometido a esta cirugía y hacen ejercicio tuvieron un mayor gasto de energía durante la actividad física moderada y demostraron una disminución significativa en la respuesta de la glucosa (el azúcar) después de las comidas, así como otras mejoras en la calidad de vida.

Es un proceso sencillo, pero de cuidado

Realizarse este tipo de cirugía no debe tomarse a la ligera, ya sea para controlar el peso o para controlar la diabetes tipo 2. Betances sostiene que es imprescindible que se vea cada paciente como un caso único y realizar numerosos exámenes de la mano de un equipo médico multidisciplinario, como diabetólogos, endocrinólogos, nutricionistas, sicólogos, neumólogos, cardiólogos y anestesiólogos. “El objetivo del trabajo con un equipo multidisciplinario, es lograr una correcta selección y preparación para el paciente que se someterá a este tipo de intervención, a los fines de disminuir los posibles riesgos y se obtendrán resultados satisfactorios a corto, mediano y largo plazo”.

En cuanto a quedar embarazada, los especialistas recomiendan evitar un embarazo por lo menos 18 meses después de la cirugía. Quienes no manejan la información correcto del tema dicen que estas cirugías pueden causar desnutrición en el paciente, que la pérdida de peso no se puede controlar y que es un proceso muy agresivo. Es por eso que hay que dirigirse a un especialista y aclarar cualquier interrogante. También existen muchas dudas sobre la caída del pelo luego de este tipo de cirugía, que según estudios esto afecta más a mujeres que a hombres y suele ocurrir en el 30% de los casos, lo cual se debe a los cambios alimenticios.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas