El historiador José Chez Checo dijo que la obra El golpe de estado. Historia del derrocamiento de Juan Bosch, de Miguel Guerrero, enriquece la bibliografía sobre ese acontecimiento histórico.Además, sostiene que el libro del periodista y escritor muestra la necesidad de erradicar la idea de los golpes contra gobiernos democráticos “porque el pueblo ha hecho conciencia de que, en términos políticos, económicos y sociales, para nada sirven”.
Chez Checo agregó que la obra de Guerrero es novedosa por el uso de fuentes orales “basadas en los valiosos testimonios de muchos protagonistas y la narración subyugante del hecho histórico estudiado, contextualizado en las coyunturas nacional y regional de la época”.
“Con esa prosa directa y llana, pero pulcra, elegante y honrada que lo caracteriza como periodista y escritor, Miguel Guerrero cautiva al lector y provoca que el mismo asista a una especie de película o a un drama que podría titularse: Cómo se gesta y se prepara la ejecución de un golpe de Estado y, ante tales acontecimientos, el futuro golpeado no haga lo que tiene que hacer para evitar el golpe”, agregó. Chez Checo hizo la presentación en el lanzamiento de la edición especial de la obra, la sexta, con motivo de conmemorarse, el próximo miércoles 25 de este mes el 50 aniversario del derrocamiento de Bosch, que puso fin al primer experimento democrático desde la caída de la tiranía de Trujillo. La actividad se realizó en la Academia Dominicana de la Historia, con la presencia de directivos de la entidad, intelectuales, escritores y público en general.
“Esta obra, que ha enriquecido la bibliografía existente sobre el tema, cumple a cabalidad con todos los requisitos del buen trabajo historiográfico”, dijo, al tiempo de agregar que la narración “es minuciosa, objetiva y equilibrada, pues toma una posición equidistante entre la posición apologética de la persona de Bosch y la diatriba prejuiciada del mismo”. Señaló que Guerrero “expone todo el dramatismo de ese momento histórico y el protagonismo desempeñado por los militares golpistas”, así como la impotencia de quienes se oponían al golpe.
