El movimiento Ciudadanos Contra la Corrupción (C3) recusó ayer  a tres de los jueces de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia  que conocen la querella contra el senador Félix Bautista. Previo a la recusación, Remberto Pichardo, miembros del movimiento, había solicitado al tribunal que aplazara la audiencia para que el juzgado esté conformado por los cuatro magistrados que desde el principio estaban llevando el caso: Miriam Germán Brito, Frank Soto, Alejandro Moscoso Segarra y Juan Hirohito Reyes. Ayer faltaba Germán Brito.

El pedimento de Pichardo se sustentaba en que la decisión de la sala sería más “justa” si la tomaban los cuatro magistrados, pero fue rechazado.

Marino Félix, uno de los abogados de Bautista, dijo que la acción de los demandantes no es más que una patraña porque no tienen pruebas para hacer valer sus acusaciones.

El C3 sostiene que el senador sobornó al presidente de Haití.

Todos los jueces de la Segunda Sala de la Suprema Corte (SCJ) fueron recusados, por separado, por los denunciantes de dos casos. En el momento en el que se conocía un recurso de apelación contra la sentencia del magistrado Víctor José Castellanos, que reabre la investigación por corrupción contra el senador por San Juan de la Maguana, Félix Bautista, los abogados de la Alianza Dominicana contra la Corrupción (Adocco) recusaron a los jueces, Alejandro Moscoso Segarra, Juan Hirohito Reyes, Frank Soto y Mirian Germán Brito, ya que, por múltiples razones, entienden que no serán imparciales en el conocimiento del proceso.

La audiencia recesa a los fines de que el pleno de la Suprema Corte decida si los jueces recusados pueden o no seguir conociendo del recurso presentado por Bautista.

Otra audiencia, en la que se conocía un recurso similar, corrió la misma suerte luego de que los jueces también fueran recusados por la Convergencia Nacional de Abogados (Cona).

La Cona, dirigida por el abogado Yuniol Ramírez, alegó en su denuncia que en sus funciones como director de la Oficina de Ingenieros Supervisores del Estado (Oisoe), Bautista violó la Ley sobre Compras y Contrataciones de Bienes y Servicios; la Constitución de la República y el Código Procesal Penal.

En ambos procesos la jueza Esther Agelán Casasnovas se inhibió porque una de las decisiones atacadas, precisamente la depositada por Cona, fue decidida por ella, reabriendo la investigación contra Bautista. Tres sentencias fueron emitidas en el alto tribunal sobre acusaciones de corrupción y soborno contra el funcionario. Dos de ellas , ya se están conociendo la apelación.