Santiago. La Fiscalía de Santiago solicitó ayer declarar en rebeldía al sacerdote polaco Wojciech Gil, acusado de abusar sexualmente de tres menores en la comunidad de Juncalito.El Ministerio Público solo está a la espera de que el cuarto juzgado de la Instrucción conozca la petición, la cual forma parte del proceso que busca el retorno del cura desde Polonia.
La fiscal Luisa Liranzo dijo que hicieron la solicitud debido a las dificultades para diligenciar el regreso del cura católico, quien tras un viaje hacia Polonia, decidió quedarse y no venir a enfrentar las acusaciones que pesan en su contra.
Aunque el escándalo fue desatado a finales del mes de mayo de este año, el caso prácticamente había caído en un punto muerto, pese a los intentos para que la Iglesia católica medie para conseguir el retorno del sacerdote, quien ejerció su labor pastoral durante ocho años en dicha comunidad.
El 26 de junio, la Fiscalía informó el inicio de las diligencias para traer desde Polonia al sacerdote Wojciech Gil, durante una solicitud hecha por escrito a la magistrada Gisela Cueto, directora del Departamento de Extradición de la Procuraduría General de la República, lo que permitiría iniciar el proceso.
Aunque en principio al sacerdote le atribuían la violación de catorce menores, en los interrogatorios hechos a los padres y a las posibles víctimas solo se confirmaron tres casos.
En otro caso, en Bonao, en una carta presentada durante el juicio de fondo que se conoció el lunes en el Tribunal Colegiado de ese Distrito Judicial, la adolescente que supuestamente fue abusada sexualmente pide perdón al sacerdote Alberto Zacarías Cordero Liriano.
En la misiva señala que sus familiares hicieron que ella lo acusara para que él se casara con ella. La audiencia fue aplazada para el lunes 26 de agosto para realizar un estudio en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses para determinar si las letras del escrito corresponden a la adolescente.
