El teniente Amado (1 de 2)

La Escaleta,  es “la búsqueda de los escalones que el protagonista tiene que subir para llegar al final de la historia”. En inglés outline. Por analogía, concentra dos conceptos básicos de un guión: primero, la historia no es un mero vagabundeo&

La Escaleta,  es “la búsqueda de los escalones que el protagonista tiene que subir para llegar al final de la historia”. En inglés outline. Por analogía, concentra dos conceptos básicos de un guión: primero, la historia no es un mero vagabundeo del protagonista, es un recorrido que hace con dificultad, como subir una escalera; y segundo, que la historia sigue siempre in crescendo – los obstáculos y los problemas deben ser cada vez más difíciles de superar.

Cada peldaño es un punto de inflexión que paulatinamente trae transformación creíble y argumentada. Para que un personaje eclosione o que las circunstancias eclosionen a su alrededor debe mostrar esa metamorfosis a partir de cambios en el ánimo y/o actitud. En esta película hay “cambios”, pero estos están fundamentados en una exposición de anécdotas desconectadas de una escena a la siguiente, no hay un gancho de una escena que continúe en la siguiente, que es lo que va componiendo el arco dramático. Hay algo que se cuenta, pero que apenas pasa información, datos, sin crear empatía ni por la historia ni por el personaje. Produce sí fastidio, porque quien acude a verla se topa con lo mismo que ve en las telenovelas: personajes que se encuentran en cualquier lugar y sueltan una “discusión”, por ejemplo. Cuando el guionista se abandona a ese facilismo, entra en acción la antropofagia que va matando cualquier atisbo de creatividad. Surge el guión barato, artificial, chapucero.  Es una metáfora de cómo no debe trabajarse un guión sobre un personaje o hecho reales.  Desde el punto artístico, falla. Y si vamos a hechos históricos y las consecuencias sociológicas que llevaron al magnicidio, se hunde miserablemente, pues también la visión se reduce a una exposición mirando solo aspectos anecdóticos de tipo políticos, militares y económicos, no hay una concreción ideológica del guionista, pero mucho menos una expresión de la cuestión cultural en la Era de Trujillo. Al inicio ya se muestra en los lettering ese olvido a pota de la cuestión cultural, y digo a pota porque me parece que un analfabetismo cultural de ese nivel en los creadores de la película sería ya bastante bochornoso. No hay guión cinematográfico, no hay drama, ni suspenso, ni historia… de historia solo en la del cine dominicano.

Sin estrellas. Dirección: Félix Limardo.  Guión: Huchi Lora. Elenco:  Efraín Figueroa, Mercedes Renard, Antonio Jaramillo.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas