SAN FRANCISCO, California, EE.UU. (AP) — La Corte Suprema de California se negó el lunes a emitir una orden de emergencia para detener inmediatamente la emisión de licencias de matrimonio a parejas del mismo sexo.
No obstante, la Corte todavía planea analizar si el gobernador y el procurador estatal de justicia actuaron correctamente al instruir a las oficinas de registros municipales que la prohibición a las bodas gay, aprobada por voto popular, se había vuelto legalmente inválida a nivel estatal.
Sin hacer comentarios, la Corte rechazó la petición de grupos que respaldan la prohibición, quienes solicitaron que se emitiera una orden de emergencia para mantener vigente la llamada Proposición 8 mientras hacían un último intento legal para que siguiera operando.
«Aunque hubiéramos preferido que la Corte Suprema de California emitiera una orden para que la enmienda a las leyes sobre matrimonio sea respetada más temprano que tarde, mantenemos la esperanza de que la Corte reconocerá que la Proposición 8 sigue siendo ley en California y las oficinas del registro continúen cumpliendo con ella», dijo Austin Nimocks, representante legal de una coalición de grupos religiosos que presentó la Proposición 8 en la elección de 2008.
Chad Griffin, presidente de Campaña de Derechos Humanos —organismo activista que trabaja en favor de los homosexuales_, quien presentó la demanda que resultó en el regreso de las bodas gay a la entidad más poblada de Estados Unidos, luego de cuatro años y medio de proceso legal, elogió la decisión de la corte estatal que permite que las bodas se sigan celebrando.
«Nuestros oponentes fallaron en un intento desesperado de negar felicidad y protección a parejas de lesbianas, homosexuales y sus hijos, y ninguna discusión legal va a acabar con esa alegría», dijo Griffin.
La Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos despejó el camino para que los matrimonios entre personas del mismo sexo volvieran a celebrarse en California al rechazar, el 28 de junio, la apelación que un grupo de partidarios de la prohibición presentó ante una corte de menor rango, la cual declaró inconstitucional la negativa. La Corte Suprema decidió que los patrocinadores de la Proposición 8 carecían de la autoridad para defenderla después de que el gobernador y el procurador de California se negaron a hacerlo.
La Corte Suprema de California todavía planea revisar si la decisión de la corte de menor rango que invalidó la prohibición y un mandato adicional que prohibía al Estado aplicarla debe extenderse a toda la entidad o sólo operará en los condados de Los Angeles y Alameda. Las dos parejas que presentaron una demanda para abolir la prohibición viven en esos condados.
