Gilberto Santa Rosa es uno de esos artistas que no necesitan reinventarse. Las estrategias arriesgadas, esas a que apuestan muchos intérpretes en estos días en que lo estridente y tribial puede ser efectivo, aunque poco duradero, no van con el carismático salsero de Puerto Rico. Eso sí, Santa Rosa sacudió su exitoso cancionero, incorporando nuevas canciones de Soy, su álbum más reciente y, sobre todo, respaldado por una orquesta integrada solo por mujeres. Toda una novedad, por lo menos para él.
¿Dónde estás, sigue residiendo en Puerto Rico?
Sí, aquí tengo mi casa y también plaza. Mi país tiene muchas cosas buenas, otras malas, pero sigue siendo un gran país. La isla me ha servido para desarrollar mi música, un país que siempre está abierto a los sonidos del mundo. Además de la salsa, habían otros géneros que me influenciaron y me permitieron prepararme en ese campo.
¿Cómo va en el mercado su nuevo álbum, Soy?
Ningún artista vende lo que vendía antes. El problema han sido los formatos, no soy un experto, pero cuando empecé a ver cómo iba la cosa, en reuniones con ejecutivos de la industria decía que si los problemas eran los formatos, la música siempre va a seguir. Tenemos que saber cómo vamos a controlar estos nuevos formatos. Las ventas del disco físico se han reducido, los latinos han aprendido a comprar música legalmente desde internet, así que esto puede ir cambiando para bien.
Aún con ese panorama, los artistas deben seguir grabando…
Esa es la manera de estar en contacto con el público, publicando discos. Hay que ajustarse a los tiempos. Soy un poco chapado a la antigua, creo que la radio sigue siendo el medio más importante para la música. Antes, cuando una canción se pegaba, la escuchabas en todas partes, radio, televisión; pero ahora es más difícil por los tantos medios, demasiados recursos tecnológicos. Hay que lograr que la música se mueva, al final todavía hay gente que le gusta tener un disco en la mano.
¿Cómo se involucra en el proceso de producción de sus discos?
Seleccionar las canciones es lo que más me divierte de la producción. Hay colegadas que les gusta estar metidos en el estudio interesados en todas las fases del proceso, pero a mí me gusta más la parte creativa. Es un proceso que nunca para, por donde quiera que voy estoy con gente que me da canciones interesantes, compositores a los que les he grabado muchas canciones. Después que termino con una preselección, selecciono esas ocho o diez canciones que voy a grabar. Regularmente, siempre me pasan a última hora una buena canción, y debo sacar una para entrar otra. Me fascina todo eso, soy el que escojo las canciones, los arreglistas y todo el equipo técnico de grabación.
Sus fanáticos siempre disfrutan de sus conciertos, aún cuando no tenga nuevas canciones. ¿Cuáles novedades le traen a nuestros escenarios?
El concierto se llama “Ellas”. Está basado en una orquesta femenina que me va a acompañar y, como siempre, claro que voy a cantar mis éxitos, algunas cosas nuevas, sorpresas diferentes que preparamos para los espectáculos de cada país que visitamos. La orquesta de las muchachas tiene 20 años desde que se creó y tengo ya cinco años trabajando con ellas. Ha sido una gran satisfacción trabajar con mujeres. No es ninguna mentira que la salsa es un género muy machista, la participación de las mujeres ha sido muy limitada. Así que les he dado una oportunidad para que se destaquen.
El 2012 fue un año interesante para la salsa en el país, usted que camina por el mundo ¿cómo percibe lo que está pasando con esta música?
Han surgido muchachos nuevos que tienen otro sabor, vienen con otras influencias y propuestas interesantes. En lo personal me gusta mucho Michell, pero ustedes tienen también a Sexappeal y otros más que están en la escena que ahora no recuerdo sus nombres, que se están destacando en un país donde lo que la gente está esperando es que se haga bachata, merengue, típico o mambo de calle o dembow. Y surgen esos salseros, músicos además, que quizás en otros momentos, aún cuando tenían talento, no tenían las posibilidades de hoy. Todo eso es importante para el género, solo hay que esperar porque el público los apoye.
Un nuevo aire
En otros tiempos, la salsa fue la reina. Los salseros siguieron trabajando con el tiempo en contra, y ahora se ven los buenos resultados”.
Más apoyo
Es importante que surjan nuevos relevos, hay un movimiento de jóvenes que se está levantando. ¿Qué falta? Les falta difusión”.
De los veteranos
Dominicana tiene muchos talentos en la salsa, en lo personal me gusta el trabajo de Michell, también está Sexappeal y otros buenos cantantes”.
