“La profesión de restaurador se respeta poco en el país”

Féliz, eres artista plástico, escultor y restaurador ¿por cuál de las tres te inclinas más?

Féliz, eres artista plástico, escultor y restaurador ¿por cuál de las tres te inclinas más?
Realmente yo amo la pintura y la restauración, pero mi gran pasión es la escultura, desearía poder estar dedicado tiempo completo a ésta.

¿Cuál es el objetivo de un restaurador?
El propósito de un restaurador es preservar los bienes  culturales con valor histórico, intentando devolverle a una obra de arte su integridad, como la que tuvo en el momento de su creación. Sin condenarla.

¿Cómo te inicias en la restauración?
En el año 1988 llegaron al país un grupo de restauradores de distintas nacionalidades. Había un peruano llamado John Padovani, quien se acercó a la Escuela de Bellas Artes para impartir un seminario, y posteriormente armó un equipo  de estudiantes para la conservación y restauración  del Palacio Virreinal (Museo Alcázar de Colón), donde me inicié en el mundo de la restauración. Luego pasé a formar parte del equipo de restauradores de Patrimonio Cultural bajo la dirección del arquitecto Glauco Castellano, donde tuve la oportunidad de hacer cursos talleres en esta área a nivel internacional.

¿Cuál es el estado de la profesión de restaurador? ¿ha cambiado mucho?
La restauración es una profesión noble, de mucha importancia en las sociedades, puesto que en nuestras manos están la historia, la cultura y la identidad de los pueblos, a pesar de que en nuestro país no es una profesión muy conocida y poco respetada ya que se realizan muchas intervenciones en bienes culturales por personas que no conocen los procesos ni las reglas que existen para trabajar una obra de arte. De hecho, en la administración anterior del Ministerio de Cultura el Centro de Restauración fue prácticamente desmantelado. Esperamos que las nuevas administraciones le den el valor y la importancia que tiene la restauración en la sociedad.

¿Las técnicas de restauración han cambiado o se mantienen a lo largo del tiempo?
En los procesos de restauración y conservación no existen muchos cambios, lo que sí varían constantemente son algunos materiales que se introducen en el mercado facilitando las intervenciones y reduciendo considerablemente el tiempo de los trabajos.

¿Qué técnicas destacarías como novedosas en los últimos años?
Los avances en los análisis de laboratorios son los  que determinan con exactitud lo que es original en una obra de arte que ha sido intervenida varias veces  a través de los siglos, por ejemplo los trabajos realizados en la capilla Sixtina.

¿Qué se debe tomar en cuenta para la restauración de una obra o patrimonio?
Hay un principio básico en restauración que es la reversibilidad. Lo que quiere decir, que cualquier material que uno utilice para restaurar una obra se pueda retirar con facilidad y no usar materiales irreversibles que puedan perjudicar la obra de arte, y otra cosa es respetar siempre lo que es original en la obra sin modificarlo.

Parece que hay muchas tendencias dentro de la restauración. ¿Crees que la más aceptable es la de la mínima intervención al restaurar?
Sí, estoy completamente de acuerdo con la menor intervención posible en las obras de arte. Yo personalmente me inclino más por la conservación, salvo las obras que están en culto, como son las pertenecientes a las iglesias, que sí deben tener un cien por ciento de su integridad, ya que son obras con un valor religioso y devocional.

¿Qué proyectos tienes en la actualidad?
Actualmente  estoy realizando la parte final del proceso de las réplicas en bronce de las puertas en madera tallada del escultor dominicano Gaspar Mario Cruz, en la Catedral Metropolitana  de Santiago, y luego continuaremos con la restauración de los retablos y la realización de una escultura, que será colocada en la fachada de dicha catedral.

Moisés Féliz tuvo una infancia feliz en su natal Barahona. Después de recorrer distintos pueblos llega a Santo Domingo con el firme propósito de estudiar lo que él considera es su pasión: las artes plásticas. “Yo amo la pintura y la restauración. Pero mi gran pasión es la escultura, desearía poder estar dedicado tiempo completo a ésta”, asegura Féliz.

Con una amplia formación artística, este artista ha realizado obras importantes, entre las que se encuentran múltiples esculturas en diversos lugares del país y ha trabajado en proyectos de restauración en iglesias históricas como la iglesia Santa Cruz de El Seibo, la catedral de San Pedro, la iglesia Santa Bárbara y la restauración del  conjunto de retablos del Convento de los Dominicos en la Zona Colonial.

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