Vive

Pasado por el colador de mis sentidos y por mi loca terquedad de hacer el bien, este blog será un camino construido paso a paso sobre la realidad…

Pasado por el colador de mis sentidos y por mi loca terquedad de hacer el bien, este blog será un camino construido paso a paso sobre la realidad de vidas no tan color de rosa, pero sin perder la mesura ni darle paso a pesimismos molestos. Es para los que creen, aunque les llamen ilusos, en un mundo feliz.

Mientras a algunas firmas de moda internacional, empecinadas por lo perfecto, se les va la mano con el photoshop y amputan brazos y piernas, y borran ombligos, en Somalia, una madre deja a su hijo enfermo a la orilla del camino porque temía que pudiera resistir el trayecto hasta llegar a Kenia. Otra da a luz debajo de una Acacia y en 22 días el agua ha sido su único alimento. Así lo narra la periodista de la BBC Anne Mwathe.

La crisis económica ataca a la señorial Europa: se tambalea Italia, Grecia amerita un rescate, Francia, España y Alemania mantienen un duro debate. Con la “gripe” del Euro, se evidencia de este lado del mundo, una pulmonía en el peso.

La vida transcurre lenta para los que caminan a pie, con la lluvia sorpresiva a cualquier hora, que moja los ánimos ya “resfriados” por la inseguridad, el alto costo de la vida y los feminicidios, que no terminan de menguar.

Al margen, en esta tricolor Quisqueya, cinco jóvenes de Valverde Mao se propusieron la meta de leer por 300 horas ininterrumpidas los textos de Juan Bosch y darle la posibilidad a República Dominicana de entrar en el libro de Record Guinness si logran cumplir la proeza.

Su iniciativa no ocupa grandes espacios en la palestra pública, pero oxigena el ambiente contaminado de protestas que, el pasado lunes 11 de este séptimo mes del año, dejó un saldo de muertos mínimos (tres), pero igual amargos.

Las pequeñas o grandes sacudidas nos recuerdan que la vida es hoy, ahora, en este instante. Qué es de valientes el camino y que no hay otra opción que luchar porque cada amanecer nos traiga un porvenir mejor: leyendo cuentos, animando a un enfermo, cuidando a los hijos o haciendo malabares en los quehaceres del hogar la ropa. Picando pleitos en los tribunales, a bordo de una “voladora”, a pie en el asfalto caliente de la ciudad. Desde dónde sea, que nada detenga tus sueños, así sea ser bombero, como cantó orgulloso el inmolado Facundo Cabral. No permitas que lo superficial te aparte de lo esencial. ¡Vive!

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