LA ROMANA.-Nunca se sabrá si el menor Jeidy de Jesús Mercedes, de 13 años, se ahorcó por las reprimendas de su madre o porque el padre no le llevó un par de tenis que le había prometido.
Lo cierto es que los residentes en el sector Villa Real, en la carretera que une a La Romana con San Pedro de Macorís, se sienten abatidos por el caso ocurrido la tarde del miércoles.
El niño fue encontrado por su prima hermana Persia María Martínez, de 46 años, con una extensión eléctrica atada al cuello y colgando de una madera usada como closet.
El dolor y las conjeturas van de la mano en Villa Real, jurisdicción del municipio Villa Hermosa, al Oeste de La Romana.
La madre, Esther Rodríguez, dice que «regañó» al niño en horas de la mañana, debido a que no asistió a la iglesia -como éste le prometió- y por el contrario lo encontró jugando en la calle.
Luego, un poco más tarde, rehusó que Jeidy la acompañara a donde su madre porque, según reveló, no se preparó a tiempo.
Pero, en un dato que aporta la Policía, el niño pudo quitarse la vida porque supuestamente su progenitor Miguel Mercedes no le llevó un par de tenis cuando lo visitó en la mañana.
