El juzgado de Atención Permanente de Santiago dictó medidas de coerción contra una mujer acusada de vender a su hijo de ocho meses de nacido, por 100 mil pesos.
La jueza Ingrid Liberato dispuso una garantía económica de 500 mil pesos, impedimento de salida y presentación periódica para la supuesta compradora del infante, cuyo nombre no ha sido revelado por las autoridades y exoneró a Mercedes Batista, la madre, por entender que no posee la capacidad económica para pagar.
La fiscalía entiende que existen pruebas suficientes que incriminan a la joven Mercedes Batista, madre del infante, quien alega que su vástago estaba muy enfermo y tuvo que cedérselo a la mujer que le ofreció el dinero.
Batista afirma que lo que se hizo con su vástago fue una obra de caridad porque no tenía los recursos necesarios para costear ningún tratamiento médico
