WASHINGTON. La ONU descartó que la concentración reciente de personas armadas que buscan la restauración del ejército represente una amenaza de confrontación.El principal representante de la ONU, el chileno Mariano Fernández, dijo al dictar una conferencia que estas personas “están armadas con pistolas y rifles viejos, y tienen una camisetas verdes. No son nada que pueda hacer frente a los 10,000 soldados profesionales que la ONU tiene en Haití. Sabemos exactamente cuántos son y cuán armados están”.
Señaló que la mayor concentración ocurrió el último fin de semana, cuando se reunió un millar de personas que incluyó a antiguos miembros de las fuerzas armadas que reclaman 15 millones de dólares en pensiones y salarios atrasados, y a jóvenes desempleados.
Decenas de exsoldados han incrementado durante las últimas semanas su presión para que Martelly cumpla su promesa de campaña para restaurar el ejército.
Además de realizar maniobras estilo militar en varios lugares, el grupo ha recorrido las calles luciendo viejos uniformes camuflados y botas, despertando temores entre funcionarios extranjeros de que puedan ser usados como milicias privadas
