Santiago.-Con atuendos indígenas, los moradores de la comunidad Los Guandules de Hato del Yaque marcharon ocho kilómetros en reclamo de asfaltado de sus calles.
Mientras los residentes en el barrio Francisco del Rosario Sánchez, choferes de la ruta ZP y representantes de juntas de vecino desafiaron una llovizna para desplazarse a pies y en vehículo hasta el edificio del ministerio de Obras Públicas, también demandando reparación de doce de sus calles del sector ubicado al norte de Santiago.
Josefina Betances, representante de la junta de vecinos Los Guandules decidió colocarse dos plumas, una cinta amarrada a la cabeza y un espejo, como forma de denunciar las veces que han sido engañadas por las autoridades.
“Ya estamos cansados, queremos decir que no somos indios aunque nos traten así, hemos acudido a todos los mecanismos, pero se han burlado de nosotros”, apuntó Betances.
Los manifestantes mediante consignas, pancartas y canciones de protesta de como: “La guagua va en reversa”, recorrieron desde Hato del Yaque, La Herradura hasta la gobernación provincial donde montaron un piquete.
El gobernador Raúl Martínez dijo que tenía previsto una visita a la comunidad en la tarde del martes, pero los organizadores de la jornada de protesta marcharon.
Atribuye las manifestaciones a actividades propias de la oposición en tiempos de campaña electoral. Los residentes de Los Guandules tienen programado una serie de actividades y la próxima semana realizarán una jornada cívica con juegos de dominó y comida en el puente que comunidad a la comunidad de Dicayagua.
Los moradores del barrio Francisco del Rosario Sánchez dicen estar cansados de esperar promesas incumplidas.
“Hace un tiempo que comenzaron la calle principal y solo terminaron una parte, otras doce siguen deterioradas y cuando llueve tenemos que nadar entre el fango”, expresó Julián Jiménez, uno de los voceros de la barriada.
Los perredeístas también realizaron una rueda de prensa para denunciar los atropellos de que fueron objetos varias mujeres hace dos semanas cuando realizaban una protesta de cacerolazos en el barrio Los Ciruelitos debido al alto costo de los productos de consumo masivo y la inseguridad ciudadana.
Tan solo en el mes de febrero se han realizado 11 marchas y piquetes en diferentes puntos. El pasado viernes fueron cuatro simultáneas, todas contra las largas tandas de apagones y por carretera y agua potable.
